La Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) presentó un plan de contingencia de cara a una eventual llegada de la epidemia del coronavirus a El Salvador.

La gremial ha girado una serie de instrucciones para contener posibles contagios. Hasta ahora el país se mantiene libre de casos

El presidente de la ANEP, Luis Cardenal, explicó que en la primera fase reforzarán los controles sanitarios dentro de las empresas, medida que incluye mejora en los protocolos de limpieza, así como la distribución de antibacteriales y otros insumos, además de jornadas de prevención.

En una segunda instancia, en caso de identificar contagios, las empresas activarán nuevas medidas que involucran, por ejemplo, esquemas de teletrabajo en los sectores donde esto sea posible.

Cardenal hizo un llamado a la calma, pero sentenció que el avance de la pandemia es una situación “inédita” que representa desafíos para el país y que “puede causar mucho daño a la economía”. Anticipó que buscarán “hacer todo al alcance para impedir que el virus cause los menos estragos posibles”.

La gremial destaca que desde el inicio de la alerta el sector más golpeado es el turístico, el cual reporta una desaceleración del 30 %, en tanto que las importaciones de China muestran leves variaciones a la baja, situación que se prevé se agrave por las restricciones y problemas que ya experimenta la industria aérea en el mundo.

“Estamos preocupados creo que estamos entrando en detalles importantes, si hay que cerrar una empresa, por ejemplo: si un niño se enferma en una escuela hay que cerrar la escuela por 30 días, y no sé si sea la mejor medida… ¿Qué protocolos se van a usar dentro de una empresa? ¿Cuántas personas qué porcentaje se va a considerar antes de decir que la empresa de manera completa se va a cerrar?”, cuestionó Cardenal.

El presidente de la ANEP sostiene que en este sentido hay que tener cuidado por que si se llega a eso hay pocas empresas que pueden continuar operaciones si enfrentan un cierre total de 30 días.

Previo al anuncio de cuarentena anunciado por el presidente Nayib Bukele, los gremios empresariales resentían la falta de comunicación oficial, aunque sostuvieron de que hay disponibilidad total para acompañar iniciativas en favor de la salud.

Sin embargo, el sector se muestra preocupado por el alcance de medidas drásticas como la posibilidad de órdenes de incapacidades masivas.

“Dentro del sector formal las empresas adscritas al Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), el patrono paga en los primeros cuatro días de incapacidad, pero si declaran más de 30 días ese costo se traslada al ISSS y supongamos que hay 800,000 empleados y vamos a ser pesimistas y un tercio de esas personas se declara incapacitada serían 200,000 personas a las que el ISSS debería pagar el salario en ese período vamos a otro personal ¿Tiene el ISSS la capacidad de pagar y la capacidad logística para atender a toda esa gente?”, cuestionó.



Recomendaciones de ANEP a sus agremiados

 

Información oficial

Acatar las recomendaciones de prevención emitidas por las autoridades nacionales.

 

Activar protocolos

Las empresas deben reforzar sus políticas de prevención, esto incluye charlas y refuerzo a sus controles sanitarios.

 

Lavado de manos

La gremial insiste que el adecuado lavado de manos es una de las principales medidas para contraer el COVID-19.

 

Seguimiento

En caso de identificar casos, las empresas deben evaluar opciones como el teletrabajo o de flexibilidad laboral.