La playa El Tunco es uno de los principales destinos para los turistas internacionales que practican surf. /F.V.

En vísperas del inicio de Semana Santa, los comercios en las playas salvadoreñas se preparan para recibir turistas tras un 2020 en el que permanecieron sin actividad debido a las restricciones de movilidad.


Hace un año, el sector cerró operaciones tras decretarse la cuarentena por la pandemia del covid-19 y permaneció paralizado hasta septiembre; sin embargo, aún se mantiene en cifras rojas por la baja demanda y las restricciones de viajes internacionales.


Krissia Rivera, vendedora de artículos en la playa El Tunco, relató que durante la cuarentena “queríamos subsistir de ir a pescar al mar para sacar el alimento, pero no se podía salir de la casa”.




Flor Amaya, comerciante en El Tunco, espera recuperar las ventas durante Semana Santa tras un 2020 en el que paralizó sus actividades por la pandemia. Los empresarios reconocen que todas las tiendas abrieron en la reactivación económica. /F.V.

“Afectó a la mayoría de las personas porque toda la gente local vive del turismo y aquí se cerró todo. Solo tiendas de cosas básicas estaban permitidas para permanecer abiertas, entonces la gente que vive de hoteles, restaurantes, tiendas de ropa, tuvimos que cerrar y algunos no volvieron abrir”, explicó Flor Amaya, comerciante de ropa.



Optimismo tras el gran encierro.


Las vacaciones de verano iniciarán este fin de semana y se extenderán hasta el 4 de abril próximo. Durante este período, según el Ministerio de Turismo (Mitur), se esperan recibir 20,000 visitantes que dejen $17.2 millones.


“Estamos calculando que alrededor de 20,000 personas nos visiten de nuestra hermana República de Guatemala, nuestros hermanos en el exterior y nuestros hermanos hondureños”, manifestó Morena Valdez, titular del Mitur.




Surfistas en la playa de El Tunco. Este es uno de los principales atractivos del país para los turistas extranjeros, sobre todo los brasileños que frecuentan las costas salvadoreñas para practicar este deporte. /F.A.

De igual forma, Valdez mencionó que para el turismo interno se prevé la movilización de 600,000 viajes que dejarían $12.9 millones en gastos.


Pese a un 2020 sin operar, los empresarios se muestran optimistas y esperan un incremento en el movimiento en Semana Santa. Se preparan principalmente con medidas de bioseguridad, así como con renovaciones en sus negocios.




Alcohol gel para los turistas que llegan los centros turísticos en la playa El Tunco, en La Libertad. Esta es una de las principales medidas para evitar contagios del covid-19. /F.V.

Carlos Molina, administrador de Posada Luna en El Tunco, aseguró que “nos estamos preparando con bioseguridad, como con las habitaciones, aire acondicionado, y que esté bajo todas las normas para atender a todas las personas que nos visiten”.


Estos protocolos de bioseguridad facilitarán a los comerciantes, ubicados en diferentes sectores de la playa, a la prevención asegurando un ambiente que minimice el riesgo de contagio entre trabajadores y visitantes dentro de los establecimientos.



Venta de mariscos.


Los comerciantes en el puerto de La Libertad resienten las bajas ventas y, pese al periodo vacacional, no esperan que aumenten a niveles previo a la pandemia. /F.V.

El puerto de La Libertad es uno de los lugares más visitados por los turistas nacionales y extranjeros para la compra de mariscos. Pese a que la pesca y venta se mantuvo activa en el confinamiento, los comerciantes resienten que las ventas siguen bajas y no esperan mayor cambio en las vacaciones.



“Aquí la venta se realiza más con los turistas que con los locales porque ellos son los que nos compran más. Por el momento, no se ha visto mucho aquí la venida de extranjeros”, dijo Edna, comerciante del puerto.


Carmen Tobar aseguró que, aunque “mucha gente viene y nos visita, no se está vendiendo como los años pasados y eso que se mantienen las medidas de higiene”.




Venta de artesanías en las playas y otros productos decorativos. La industria de turismo permaneció cerrada por más de cinco meses en 2020 por las medidas de confinamiento y se estima que retrocedió 10 años. /F.V.