No es un secreto que los hijos de Carlos y Diana heredaron la calvicie de los Windsor y aunque el mayor de ellos, el príncipe Guillermo, parece haberse conformado con ese problema, el caso de su hermano es diferente.

Todo apunta a que Enrique ha buscado la manera de combatir la pérdida de su cabello. Según una publicación del diario “The Sun” el esposo de Meghan Markle se hizo un retoque estético para poner fin a su las habladurías que su calvicie genera.

Enrique habría recurrido a la exclusiva clínica de Philip Kingsley en Londres, que atiende a los hombres más adinerados de Europa para tratar sus problemas de calvicie. Un testigo confirmó al periódico británico que lo ha visto visto visitar la clínica para someterse a un implante capilar.

Algunos medios que siguen de cerca la vida del nieto de la reina Isabel II aseguran que Meghan habría influido para que Enrique se sometiera a dicho tratamiento en busca de evitar las críticas por el hecho de casi siempre estar mediáticamente expuestos.

Los cambios en la cabellera del hijo de la princesa Diana son notables, en la boda real en 2018 pudo observarse que tenía menos cabello en aquel entonces y actualmente luce diferente.