Fotografía de Katya Cristales / DEM.
El Centro Histórico y sus alrededores en los últimos meses se ha vuelto una zona de comercio y de turismo atractivo para los salvadoreños. Este día a las 9:00 a.m.se llevo a cabo el traspaso presidencial en la Plaza Gerardo Barrios; las calles se vieron abarrotadas de cientos de salvadoreños que desde antes de las 6 de la mañana ya hacían fila para poder ingresar.
Los establecimientos de comercio en los alrededores de las diferentes plazas permanecieron cerrados, restaurantes y cafeterías que se esperaba estuvieran brindando servicio de desayunos desde muy temprano, tenían sus cortinas cerradas. Según el Cuerpo de Agentes Metropolitanos de San Salvador (CAM), los propietarios de dichos comercios fueron notificados con anticipación que este día podrían brindar sus servicios normales una vez finalizada la ceremonia.
Fotografía de Katya Cristales / DEM.
Sin embargo, comercios como el Café La Catedral abrió puertas a clientes que optaron por pagar un espacio en la segunda planta donde funciona, ya que desde esa zona se tiene una vista al Palacio Nacional y se podía apreciar el desarrollo de la ceremonia.
“Con mi esposo decidimos pagar un espacio para poder presenciar este acto tan importante en la historia de nuestro país, venimos desde muy temprano para que no se nos dificultara el ingreso y todo resulto como lo esperábamos, creemos que fue muy buena idea que este lugar abriera sus puertas con el objetivo que pudiéramos tener una vista adecuada al evento”, dijo Mirna de Villalta, quien adquirió un espacio en el Café La Catedral por $10.00.
Cafeterias como Cafe Fulanos, Le Cafe, Restaurante Mezclas, Kilometro Cero, entre otros, abrieron sus puertas al público aproximadamente a las 11:30 a.m. y los establecimientos ubicados en la 1 Calle Oriente Avenida Monseñor Oscar A. Romero esperarían hasta ser autorizados debido a que esas calles se estaban utilizando para parqueos de los diferentes funcionarios e invitados al Traspaso Presidencial.
Muchos asistentes al evento esperaban poder acomodarse en un establecimiento de comida y presenciar todo el acto, sin embargo, se ubicaron alrededor de las pantallas donde se estaba transmitiendo en vivo y se les proporcionaba agua embotella gratis. En su mayoría todo retomo su curso normal a partir de las 12:30 del medio día.