La situación de violencia de pandillas, la inseguridad en las calles, la migración, las fallas en las elecciones municipales y legislativas de 2015 y el incremento de la violencia, incluidas amenazas contra periodistas, maestros y público general, son las observaciones que hace sobre El Salvador el informe anual de “Freedom House” publicado ayer.

El informe revela que la libertad en el mundo ha sufrido un retroceso y en América Latina, una mejora, pero señala que la democracia en Centroamérica y Venezuela (35) afronta serios riesgos.

El informe “Libertad en el mundo 2016” evalúa el estado de la libertad en 195 países y 15 territorios durante 2015. Cada país tiene asignados entre 0 y 4 puntos en una serie de 25 indicadores para un puntaje de hasta 100, usado para determinar el nivel de derechos políticos y libertades civiles, con un rango de 1 para las condiciones más libres y 7 para las menos libres. Un país puede ser libre o parcialmente libre, o no libre.

El Salvador tiene un puntaje acumulado de 69, tiene un estatus de libertad de “libre” y de libertad de prensa de “parcialmente libre”.

El país registra un índice de libertad de 2.5, de libertades civiles, de 3, y de derechos políticos, 2, en una escala del 1 al 7. Pero presenta una “tendencia a la baja”, según el informe, El Salvador “recibió una tendencia hacia abajo debido a trayectorias negativas por fallas en las elecciones de 2015 y el incremento de violencia criminal, incluidas amenazas contra periodistas, maestros y público general”.

El Salvador está entre los países con mayores retrocesos en sus índices acumulados en derechos políticos y libertades civiles, aunque está catalogado como país libre.

“En El Salvador y Honduras , el empeoramiento de la violencia relacionada con las pandillas y la anarquía limitado en donde la gente podía viajar con seguridad. El crimen organizado y la violencia de las pandillas también siguieron aumentando en Honduras, Guatemala y El Salvador, lo que lleva a miles de ciudadanos a huir a los Estados Unidos durante el año”, indica Freedom House.

Señala el riesgo al que se enfrentan El Salvador, Guatemala y Honduras, así como Venezuela, del que destaca la “persecución” a la oposición, e indica que las bandas criminales, la “violencia política y una corrupción sistemática son un riesgo creciente a la libertad y la democracia” en los países del Triángulo Norte. Honduras es el peor calificado de la región, con 45 base 100.

Dice que el 69 % de la población mundial vive en sistemas democráticos; tres países entraron en la clasificación de país “libre” en 2015: Costa de Marfil, Nigeria y Sri Lanka; y otros tres perdieron esa etiqueta: Honduras, Macedonia y Maldivas.