La Longitudinal del Norte ha registrado inestabilidad por acumulación de agua en la zona. / DEM


La inestabilidad que ha presentado la carretera Longitudinal del Norte, sobre el kilómetro 125, específicamente, ha obligado a las autoridades a monitorear la zona con el fin de determinar la localización del agua y de la superficie de falla.

En diciembre pasado, el Ministerio de Obras Públicas (MOP) recibió de la Embajada de Japón un taladro hidráulico indicado para realizar perforaciones horizontales, que luego permiten generar drenajes en zonas donde se registran altos niveles de agua y causan daños a carreteras.

El kilómetro 125 de la Longitudinal del Norte, en el municipio de Sensuntepeque, ha sido identificado como inestable debido a la saturación de agua, lo cual ha obligado a las autoridades a realizar obras en la zona.

Actualmente, el MOP ejecuta la “fase de monitoreo para determinar la localización del nivel freático (nivel de agua) y la ubicación de la superficie de falla”; en otras palabras, realiza perforaciones verticales para conocer dónde se está deformando la carretera.

Tras estas obras, se ejecutarán posteriormente las perforaciones horizontales con el taladro hidráulico, mismo que fue donado por la Embajada de Japón a través de un convenio firmado en 2017 con el MOP por un monto de $3.9 millones.

“Una vez identificado dónde está la falla principal, si puede existir más de una falla y cómo se está comportando el agua dentro de las bases del suelo, que esa es la etapa inicial; una vez se tenga un buen registro de comportamiento, se procede a seleccionar los puntos donde se va a perforar”, explicó William Guzmán, director de Adaptación al Cambio Climático y Gestión Estratégica del Riesgo (DACGER).

Actualmente, personal de Obras Públicas realizan perforaciones verticales en la carretera. / DEM


De acuerdo con Guzmán, el taladro hidráulico permitirá que se establezcan drenajes subterráneos en ese tramo de la carretera como estrategia antideslizamiento para la estabilización de los taludes.

“Nuestra adquisición busca eso, desarrollar perforaciones horizontales para generar sistemas de drenajes en taludes y, por supuesto, en taludes que presentan una inestabilidad importante frente a la presencia de agua”, detalló.

Con el apoyo de técnicos japoneses, cuya colaboración se enmarca dentro del programa GENSAIII (una iniciativa para reforzar la infraestructura pública de El Salvador), se capacitó a personal del MOP sobre el uso del taladro, que será utilizado por primera vez en el tramo de la carretera Longitudinal del Norte, en Sensuntepeque, al concluir las perforaciones verticales.

El taladro está compuesto por una planta eléctrica, bomba de agua, bomba para aceite y perforadora con punta de diamante. La herramienta tiene capacidad para perforar aproximadamente 100 metros de manera horizontal, aunque se podría “ir más allá si ciertas condiciones de suelo lo permiten”.



¿Cómo es el taladro?

El taladro se compone por una planta eléctrica, una bomba de agua, una bomba para aceite y la perforadora con punta de diamante. El MOP utilizará la herramienta por primera vez en el kilómetro 125 de la carretera longitudinal del norte, en sensuntepeque, debido a la inestabilidad que presenta esta vía.