Los museos nacionales se han mantenido cerrados. Incluso atractivos como la visita al Palacio Nacional han sido detenidas por la pandemia. FOTO/JAB


El microcentro de la capital comienza a recuperar brillo en la etapa de reactivación de la economía.

En menos de un mes, han comenzado a abrir cafés y bares de la zona turística donde los propietarios están aplicando protocolos que incluyen distanciamiento físico, alfombras para desinfección de calzado y dispensadores de alcohol en gel.

Con el turismo internacional detenido por la pandemia, los negocios han abierto sus puertas para atender a clientes locales que comienzan a retomar la normalidad y que salen a la calle usando mascarillas.



Aunque oficialmente se dio luz verde para retomar actividades desde el pasado 24 de agosto, los negocios como bares y restaurantes del Centro Histórico de San Salvador han ido recuperando su actividad de forma paulatina.

Uno de ellos es Cha Cha Chá, en el antiguo edificio del almacén París Volcán, en la esquina de la 2a. Calle Poniente y la 4a. Avenida Sur, que inició operaciones a finales de agosto y tiene un concepto al estilo cubano.



Otros, como Café Fulanos, en el parque lineal del Centro Histórico o Club La Dalia se encuentran en operación, mientras se suman nuevas iniciativas en la zona que aún no alcanza los grandes tráficos de peatones que lo caracterizan.

Las calles aledañas a Catedral Metropolitana, el Palacio y el Teatro Nacional son un paso habitual para cientos de personas que cada día cruzan la ciudad en tramos de trasbordo para dirigirse a sus trabajos.



ARCHIVO: Centro Histórico se reactiva y se apoya en venta de mascarillas

El movimiento es aprovechado por el comercio informal que en las últimas semanas ha volcado sus esfuerzos en la venta de mascarillas.

La actividad tampoco opera al 100 %, pero la mayoría trata aplicar los protocolos para disminuir los contagios de covid-19, una enfermedad que sigue latente y de la que hay un riesgo de rebrote.