El ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, confirmó ayer que el nuevo Gobierno trabaja en cómo reestructurar la deuda de mediano plazo para reducir el costo en el pago de intereses.

La Ley de Responsabilidad Fiscal para la Sostenibilidad de las Finanzas Públicas y el Desarrollo Social (LRF), aprobada en 2016, establece en su noveno artículo un período de 90 días, después de la toma de posesión del Gobierno, para presentar al Consejo de Ministros y a la Asamblea Legislativa las bases de la política fiscal que aplicará durante su quinquenio.

Ese marco fiscal debe contener la estrategia del Gobierno en materia de ingresos, gastos y endeudamiento público. De igual forma, en la nueva administración del Ejecutivo se busca “incorporar todo el manejo de reestructuración de deuda, que será parte de la forma que habrá que utilizar para disminuir el costo de pago de intereses de deuda de El Salvador”, confirmó Fuentes.

La asignación presupuestaria para los intereses por el servicio de la deuda pública aumenta cada año, por esa razón en varias ocasiones la Fundación para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) ha señalado que de seguir con la tendencia el pago de estos compromisos superará el gasto en educación en 2020.

Los datos del Banco Central de Reserva (BCR) indican que el Sector Público No Financiero (SPNF) pagó $406.7 millones en los primeros cinco meses del año en intereses por el servicio de la deuda, esto equivale a $25.8 millones adicionales a los $380.9 millones honrados en el mismo período de 2018.

Financiamiento

Para este 2019, el Gobierno ya tiene resuelta la aprobación de la Asamblea Legislativa para emitir $800 millones que se utilizarán para honrar un vencimiento de Eurobonos, programado para diciembre próximo. Hacienda asegura que “no puede” detallar el avance de las negociaciones con los inversionistas “por restricciones internacionales”.

El Gobierno debe buscar financiamiento para honrar los futuros vencimientos de bonos y Eurobonos entre 2020 y 2024. El primero está programado para 2020 por $15 millones, un segundo para 2021 por $200 millones y el tercero para 2022 por $236.25 millones. En enero de 2023 se vencen $800 millones y en diciembre de 2024 otros $120 millones.

Fuentes aseguró que, en el marco fiscal también se incluirá la reestructuración del saldo de las Letras del Tesoro (Letes) porque “entre menos deuda de corto plazo tengamos eso implica mejores resultados en términos de las finanzas y específicamente de la tesorería de la República”.