El Ministerio de Hacienda se encuentra afinando los últimos detalles para implementar la factura electrónica a mediados de 2020, un proceso que elevaría la recaudación tributaria en 1 % del Producto Interno Bruto (PIB).

“El tema de la factura electrónica ha sido un déficit de país, como parte de una agenda en materia de innovación tecnológica y en materia digital para El Salvador, hay una decisión de implementar la facturación electrónica a partir del segundo semestre del año”, aseguró Nelson Fuentes, ministro de Hacienda.

Este proceso recibe financiamiento por $1.5 millones de un préstamo de $30 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). En declaraciones compartidas por el ministro Fuentes en agosto de 2019 se indicaba que Hacienda lanzaría en enero la licitación de servicios para que en junio o julio de 2020 se aplicara con las primeras 50 empresas.

Lograr la facturación electrónica este 2020 también es parte de la Agenda Digital 2020-2030, que lanzó el Gobierno esta semana.

El funcionario señaló que ya se concluyó el diagnóstico final de la facturación electrónica “por parte de una empresa evaluadora”, que reveló “la factibilidad y la capacidad que debe tener el país para llevar a cabo este proyecto”.

“Tuvimos que considerar a dónde se va a guardar la base de datos, quiénes van a trabajar con la información. Además se creó una comisión consultiva de facturación electrónica, para que en seis meses podamos explicar a los contribuyentes las medidas a utilizar y las capacitaciones, para que las empresas vayan absorbiendo el tema”, explicó Fuentes en un foro desarrollado por Pérez Mejía Navas (PMN) y Praxity International.

La factura electrónica iniciará como un plan piloto, indicó el funcionario, en el cual se incluirán a grandes empresas como supermercados, bancos, ferreterías, industrias y zonas francas “que ya tengan la tecnología y solo necesiten el enlace”.

“Ya hay empresas que están listas para iniciar el proceso, pero hay otras que no, pero se va a determinar cuáles son las empresas que van a iniciar, porque el Gobierno decidió desarrollar un plan para llevar un seguimiento”, comentó.

Las proyecciones de Hacienda apuntan a que El Salvador ejecute por completo la facturación electrónica en los próximos tres años, en un menor tiempo si se compara con experiencias en América Latina que han tomado hasta 15 años en implementarse.

Mardoqueo Vásquez, CEO de Mega Procesos Praxity Centroamérica, indicó que Guatemala inició la discusión del proceso de la facturación electrónica en 2006 y lo principal es “buscar una figura jurídica para incorporar a la legislación tributaria”.

Vásquez explicó que en 2007 se emitió un acuerdo de directorio que sirvió para la primera fase de la facturación, para documentar el traslado de dominio, bienes y servicios. En 2011, Guatemala emitió otro acuerdo de la segunda fase del directorio, y fue hasta 2016 que se comenzó a utilizar como tal.



Integración a praxity

La firma Pérez Mejía Navas (PMN) se incorporó el pasado martes a la multinacional Praxity International, como parte de un convenio para trabajar en temas de auditorías en el mercado salvadoreño y externo.

PMN es una empresa de 25 años de experiencia en el mercado nacional, especializada en temas de contabilidad y auditorías, en áreas de impuestos y servicios legales, precios de transparencia y subcontrataciones.

Jaime Pérez, socio director de PMN, indicó que para la compañía es un honor ser parte Praxity Internacional y aseguró que el convenio “fortalece para trabajar con la comunidad de negocios y proporcionar servicios de alta calidad”.

 

 

Facturación electrónica

 

Consiste

La factura electrónica consiste en la transmisión de las facturas o demás comprobantes entre la entidad recaudadora y el usuario, por medio de comunicación electrónica.

 

Beneficios

Reduce costo de manejo y de administración de los documentos en papel, minimiza riesgos en documentos vía electrónica en figuras encriptados y se disminuye el riesgo de documentación falsificada.