Los mensajes de WhatsApp que entraron al teléfono móvil donde se colocó el himno de Sudáfrica previo al partido contra Libia hicieron que este se detuviera en más de una ocasión, provocando el desconcierto de jugadores y espectacdores.

También se escucharon otros sonidos que no corresponden a la tonada.

El usar un celular para colocar el himno fue una 'solución' de emergencia que acabó trayendo más problemas. A los segundos de silencio le siguieron pequeños fragmentos de una canción y hasta el reconocido politono de la aplicación WhatsApp cuando se recibe un mensaje.