Martín Adolfo Díaz Contreras es requerido por la justicia estadounidense. AFP


La justicia de Honduras inició este domingo el proceso contra un hondureño solicitado en extradición por narcotráfico en Estados Unidos, mientras el presidente Juan Orlando Hernández promete continuar la lucha antidrogas tras ser señalado de participar en el tráfico de cocaína a territorio estadounidense.

El comisionado de la policía, Julián Hernández, presentó ante la prensa a Martín Adolfo Díaz Contreras, de 30 años, acusado del "delito de conspiración para fabricar y distribuir cinco kilos o más de sustancias que contengan cocaína con la intención o el conocimiento de ser importada a los Estados Unidos".

Luego de la presentación, Díaz fue entregado al juzgado de extradición, que inició las audiencias del proceso para atender la solicitud hecha por una corte distrital de Estados Unidos, tras ser capturado el sábado en la zona noroccidental de Copán Ruinas.

"Con esta captura el Estado de Honduras reafirma el compromiso" del combate del narcotráfico en coordinación con Estados Unidos, subrayó el oficial.

Añadió que hay otras órdenes de captura de extraditables hacia Estados Unidos, por el mismo delito.

El presidente Hernández prometió seguir la lucha contra el narcotráfico hasta el "último día" de su gobierno, que termina el 27 de enero del 2022, para comprobar que está comprometido en el combate de los carteles que pasan la droga por Honduras en ruta desde Sudamérica hacia el mercado de Estados Unidos.

El gobernante hizo la promesa luego de ser señalado en una corte de Manhattan de conspirar para introducir cocaína hacia Estados Unidos, junto a su hermano menor, Juan Antonio "Tony" Hernández.

"Tony", de 42 años, fue capturado en noviembre de 2018 en Miami y fue sentenciado el 30 de marzo pasado a cadena perpetua al ser hallado culpable de introducir 185.000 kilos de cocaína a Estados Unidos entre 2004 y 2016.

Durante el juicio emprendido por la fiscalía con testimonios de excapos de la droga, el fiscal Jacob Gutwillig dijo al jurado que el presidente hondureño y uno de los narcotraficantes presentados en la corte, Geovanny Fuentes, "planificaron enviar tanta cocaína a Estados Unidos como pudieran", con ayuda de instituciones del Estado.

Por su parte, el presidente calificó el fallo de la justicia estadounidense como "indignante", argumentando que su hermano fue sentenciado con base en testimonios falsos de capos que actúan en venganza al ser extraditados.

Un total de 25 hondureños han sido extraditados desde 2014, otros 15 se entregaron y cinco fueron capturados por Estados Unidos, según el presidente Hernández.