Cecibel Trigueros dice no tiene dinero para comprar sus medicamentos. / Krissia Torres


Muestra las recetas frente a la prensa y explica que el hospital Rosales no tiene los medicamentos que le han prescrito; la receta dice que debe tomar Levotiroxina, calcio y D3 para contrarrestar el cáncer que le fue detectado.

Se identifica como Cecibel Trigueros, de complexión robusta y pelo corto, le pide al próximo gobierno que vele por “los pobres” que no tienen recursos para ir a un hospital privado.

“Me dejan las recetas de los exámenes y por gusto, me dejan la tiromuglobina, calcio, anti cuerpos y ni así, no hay material activo (para exámenes)... hay miles de personas y venimos de lejos, hay que pagar pasaje y de ribete hay que pagar medicamentos y la cosa de los exámenes, no es justo”, relata indignada.

Vive en San Marcos y dice que es vendedora informal en el mercado y para llegar a sus citas médicas debe vender varios días para recoger los $20 que gasta en ese viaje que solo le lleva a más preocupaciones. “Yo dejo de comer por comprar lo que me dejan”, relata.

Las quejas de la mujer son escuchadas por la prensa, cuyos miembros acaban de escuchar a los sindicalistas del hospital, médicos y enfermeras, quienes exigen que el director del Rosales sea destituido, porque no ha mejorado el nosocomio.

“Todo el tiempo roban y roban y nada dan al pueblo, solo ellos se lo llevan”, señala indignada, porque deberá rebuscarse para comprar sus medicamentos y hacerse los exámenes que el sistema público de salud no le puede dar.

Según el Ministerio de Salud la compra de medicamentos para el 2019 ingresará a finales de julio y principios de agosto; el viceministro de salud, Eduardo Espinoza, dijo meses atrás que la compra se hizo tarde.