HRW criticó que los detenidos hayan sido recluidos en centros de cuarentena en condiciones de hacinamiento. Foto: Archivo-DEM


La oenegé Human Right Watch (HRW) criticó este miércoles las detenciones de personas realizadas por el Gobierno salvadoreño ante la cuarentena nacional por la pandemia de COVID-19, calificándolas de “arbitrarias” y asegurando que las personas que son llevadas a centros de aislamiento se encuentran en “condiciones riesgosas”.

“El Presidente Bukele actúa como si cualquier política fuera válida para detener la propagación de la Covid-19, incluida la adopción de medidas que han llevado a cientos de arrestos arbitrarios”, expresó José Miguel Vivanco, director para las Américas de (HRW).

La oenegé insistió en que el mandatario debería públicamente aclarar que el uso excesivo de la fuerza y las detenciones arbitrarias son ilegales, y que no hacen parte de la política de contención del coronavirus; además criticó una falta de control en las fuerzas de seguridad y rendir cuentas ante cualquier abuso de autoridad.

“Las fuerzas de seguridad deben estar sujetas a un control estricto y rendir cuentas si cometen abusos, dado su historial, presente y pasado, de comisión de graves violaciones de derechos humanos”, apuntó Vivanco.

Para la HRW, existe la preocupación de que los comentarios de Bukele en cadena nacional y en redes sociales hayan promovido un uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades, provocando una respuesta policial “desproporcionada” ante las personas que incumplen la cuarentena.

Además, criticó que los detenidos hayan sido recluidos en centros de cuarentena en condiciones de hacinamiento, en donde aseguró que en ellos existen insalubridad.

“Cualquier detención en centros de contención debería llevarse a cabo bajo estricto apego a la legalidad y en condiciones que prevengan la propagación del virus”, exigió HRW, agregando que el gobierno está obligado a garantizar el acceso a alimentos, agua y atención médica adecuados, y a garantizar que las instalaciones que emplee para aislar a personas presuntamente infectadas para que estos no se vuelvan un foco de infección.