Investigadores de la Universidad del Sur de Australia (Australia) han encontrado una relación causal entre la depresión y una variedad de enfermedades respiratorias, cardiacas y digestivas, proporcionando información vital para ayudar a detectar y manejar altas tasas de enfermedades físicas en personas diagnosticadas con depresión.

En este estudio, los investigadores evaluaron datos de 337.536 participantes del Biobanco del Reino Unido para confirmar el rango de enfermedades afectadas por la depresión. El estudio es el primero en utilizar MR-PheWAS como análisis para detectar un vínculo causal entre la depresión y una variedad de enfermedades. MR-PheWAS es un método que utiliza datos genéticos para explorar asociaciones causales entre un factor de riesgo -en este caso, la depresión- y una variedad de resultados de la enfermedad.

Los resultados del estudio, publicados en 'Molecular Psychiatry', mostraron una relación causal entre la depresión y una variedad de enfermedades respiratorias, cardíacas y digestivas que incluyen: asma, enfermedad coronaria, colesterol alto, esofagitis, gastroenteritis, infecciones por E.coli y trastornos del sistema urinario.

"Los datos muestran que las personas que viven con enfermedades mentales graves, como la depresión, tienen tasas mucho más altas de enfermedades físicas que las de la población general", ha afirmado Anwar Mulugeta, investigadores de la Universidad del Sur de Australia.

Los investigadores han explicado que hasta ahora los estudios se habían complicado por la posibilidad de otros factores de confusión, o incluso por la causalidad inversa donde se supone que la condición física causa depresión. Pero con el nuevo estudio, comprender la relación entre la depresión y otras enfermedades pueden reducir la incidencia de comorbilidades, es decir, la presencia de una o más afecciones adicionales que ocurren con una afección primaria.

"Hoy en día, se estima que casi la mitad de la población experimenta una condición de salud mental en su vida", ha asegurado la profesora Elina Hyppönen, directora del Centro Australiano para la Salud de Precisión el profesor Hyppönen.

La investigadora ha destacado también la importancia de concentrarse en la dieta y fomentar estilos de vida saludables en este contexto. "Era preocupante ver que la depresión estaba asociada con múltiples complicaciones gastrointestinales inflamatorias e incluso hemorrágicas, que pueden deberse a los efectos secundarios de los medicamentos utilizados para tratar la depresión, o incluso debido a la mayor incidencia de infecciones por e-coli, que podrían prevenirse", ha explicado Hyppönen.

"Comprender las conexiones entre la depresión y otras enfermedades es fundamental para garantizar que las personas con depresión reciban el apoyo que necesitan. Cuanto más podamos ver al paciente en su conjunto, mejores serán sus resultados", ha finalizado.