La emergencia nacional por la pandemia de coronavirus, que ha ya dejado un caso confirmado en El Salvador, llevó a que la Conferencia Episcopal decidiera suspender todas las actividades religiosas presenciales, incluyendo las de Semana Santa, en busca de evitar las aglomeraciones de personas y posibles contagios que puedan surgir.
La iglesia católica informó que las celebraciones religiosas se harán en privado y serán transmitidas a través de los medios de comunicación: radio, televisión y redes sociales.
La medida adoptada estará vigente desde hoy hasta nuevo. La iglesia invita a los feligreses a permanecer en casa y desde cada uno de sus lugares participen en las actividades por los medios mencionados.
Además, dirige sus oraciones a todas las personas que están en cuarentena y para las autoridades gubernamentales y personal que atiende la emergencia para que “tomen las mejores decisiones en favor del pueblo”.
“Este es un momento especialmente propicio para confiar en Dios y exteriorizar nuestros mejores sentimientos de solidaridad con nuestros hermanos”, indica la Conferencia Episcopal de El Salvador a través de un comunicado de prensa.