El presidente iraní, Hasán Rohani, estimó el jueves que las sanciones de Estados Unidos impuestas a su ministro de Relaciones Exteriores, Mohamad Javad Zarif, reflejan el "miedo" y la "impotencia" de Washington, en un contexto de fuerte tensión entre ambos países.

Zarif, la voz de Irán a nivel internacional, es el principal interlocutor con Europa, China Y Rusia, países que siguen formando parte del acuerdo de 2015 sobre el programa nuclear iraní, del que salió de forma unilateral Estados Unidos hace más de un año.

"Tienen miedo de las entrevistas de nuestro ministro de Relaciones Exteriores", dijo Rohani en un discurso difundido por la televisión, refiriéndose a una serie de entrevistas de Zarif con la prensa internacional en una reciente visita a la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.

"Está absolutamente claro que los cimientos de la Casa Blanca fueron sacudidos por las palabras y la lógica de un diplomático informado y dedicado", agregó el presidente iraní, de visita en Tabriz, en el noroeste de Irán.

Rohani acusó a Estados Unidos de "hacer chiquilladas". "Nuestros enemigos son tan impotentes que perdieron la capacidad de actuar y pensar de manera sensata", dijo.

Estados Unidos impuso el miércoles sanciones al jefe de la diplomacia iraní, en momentos de agudización de las tensiones entre ambos países.

Estas sanciones implican un congelamiento de los activos que Zarif pueda tener en Estados Unidos o que esté controlado por entidades estadounidenses, anunció el gobierno, que también restringirá sus desplazamientos.

Las relaciones entre Teherán y Washington se degradaron desde la retirada unilateral estadounidense en mayo de 2018 del acuerdo internacional de Viena, que dejaba el programa nuclear iraní bajo control internacional a cambio del levantamiento de las sanciones económicas.

Washington, al considerar el acuerdo insuficiente, volvió a imponer sanciones económicas y puso en obra una campaña de "presión máxima" contra Teherán.

Irán, asfixiado económicamente, afirmó que dejaba de respetar a principios de julio algunos de sus compromisos del acuerdo y amenaza con continuar reduciéndolos si los demás Estados implicados no le ayudan a esquivar las sanciones estadounidenses.

Los Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico iraní, calificó de "absurda" esta serie de sanciones contra Zarif.

"Los estadounidenses de nuevo (...) manifestaron su hostilidad hacia el sistema iraní y la orgullosa nación (iraní)", dijeron en un comunicado.

- "Ya basta" -

Para un alto responsable de la administración Trump, que requirió el anonimato, "Zarif es el rostro del régimen que esparce en el extranjero la propaganda y las campañas de desinformación favorables al programa nuclear de Teherán, a sus misiles balísticos y a sus redes terroristas".

"Ya hace demasiado tiempo que le permitimos hacerse pasar por un representante razonable y creíble de Irán", añadió, en alusión a la imagen moderada de Zarif, a la que contribuye su inglés fluido, su humor y sus estudios en Estados Unidos.

"Hoy, el presidente Trump decidió que ya basta", afirmó este alto responsable.

Zarif respondió inmediatamente que Washington intentaba silenciar a Irán en el ámbito internacional. "La razón invocada por Estados Unidos para sancionarme es que soy el principal portavoz de Irán en el mundo", tuiteó. "¿Duele tanto la verdad?", añadió.

Afirmó asimismo que las sanciones "no tendrán ningún efecto" ni en él ni en su familia. "No tengo propiedades ni intereses fuera de Irán. Gracias por considerarme una amenaza tan grande para vuestra agenda", señaló.

La Unión Europea deploró por su parte la decisión de Estados Unidos de sancionar a Zarif, con quien los europeos seguirán "trabajando".

"Lamentamos esta decisión. Nosotros continuaremos trabajando con Zarif como el diplomático de mayor rango de Irán y en vista de la importancia de mantener los canales diplomáticos", dijo en rueda de prensa Carlos Martín Ruiz de Gordejuela, un vocero de la diplomacia comunitaria.

En una acción aparentemente contradictoria, el Departamento de Estado renovó este miércoles por 90 días algunas exenciones clave para tres proyectos del programa nuclear civil de Irán, confirmó a la AFP el Departamento de Estado.