Clave “Mónica” relató a la Fiscalía General de la República que después de ganarse la confianza de Flores Acosta, le presentó a “Carlos” y le dijo que era soldado.
“Carlos” contrajo matrimonio con “Fátima”, una de las jóvenes que estaban en la casa de Flores Acosta, junto a clave “Mónica”, como domésticas.
“La razón por la cual han retrasado su muerte es porque él es soldado y van a investigar más su muerte”, dice el requerimiento fiscal referencia 26-UTIP-2017 que tiene en su poder el Juzgado de Instrucción de San Marcos, al cual Diario El Mundo tuvo acceso a través de la unidad de comunicaciones del Centro Judicial Isidro Menéndez.
La familia del soldado sabía que se había casado y conocían a Esmeralda Aravel Flores Acosta con el nombre de “Alejandra” y esta había dicho que eran familia.
Clave “Mónica” relató a las autoridades que Flores Acosta regalaba “bastantes cosas” a la familia de “Carlos”, “lo cual hace para que cuando cobren el seguro por la muerte de este la familia no crea que ella no tiene necesidad de dinero”, dice la acusación.
A la familia del soldado, destacado en la segunda brigada de infantería, Flores Acosta dijo que era ciudadana estadounidense.
¿Cómo fichaba víctimas?
Clave “Mónica” dijo a la Fiscalía que intentó fingir ante Esmeralda Aravel Flores Acosta que no le importaban sus maltratos, y así la empezó a “sacar” y a enseñarle lo que hacía.
“Esmeralda visita bastantes lugares como bares en San Lorenzo Ahuachapán, y en San Salvador, donde conoce hombres que seduce y comienza a trabajarlos de forma tal que terminan comprando los seguros de vida, que después ella puede cobrar, que puede tardar unos seis meses”, dijo la víctima a la Fiscalía.
Flores Acosta es acusada de trata de personas agravada, proposición y conspiración de homicidio agravado, estafa agravada y agrupaciones ilícitas, en perjuicio de clave “Mónica” y clave “Mateo”.
Jefa de “Viudas Negras”quería entregar niña a pandillero
La víctima protegida por la Fiscalía, clave “Mónica”, relata que Esmeralda Aravel Flores Acosta tenía consigo a una niña de 12 años, a quien obligaba a ser visitada por un pandillero de la MS-13, alias “Sicario”. La menor habría contado a “Mónica”, que “Sicario” la había intentado tocar y que Flores Acosta le dijo que era “normal”.
Un día, la menor de 12 años de edad le dijo a la víctima que lo mejor era que se suicidaran, porque ya no aguantaba a Esmeralda Aravel Flores Acosta.