Salvadoreños beneficiados con operaciones se manifestaron ayer contra la JVPM. / Jorge López


La ministra de Salud, Violeta Menjívar solicitó la autorización para que médicos cubanos pudieran trabajar en el Centro Oftalmológico Nacional seis meses más tarde de su ingreso pero sin presentar la documentación completa ni cumplieron con los plazos establecidos, reveló ayer a Diario El Mundo, el Dr. Carlos Ramos Hinds, miembro propietario de la Junta de Vigilancia de la Profesión Médica (JVPM).

La brigada médica de Cuba, que brindaba sus servicios en el país como Misión Milagro, debía presentar documentos autenticados vía consular, es decir, haber autenticado la documentación correspondiente en el consulado de El Salvador en Cuba o presentar el título original en El Salvador para ser confrontado con la fotocopia. Según Ramos Hinds, así lo establece el reglamento de la JVPM y el Código de Salud.

“Un profesional extranjero, independientemente de dónde venga, para tener autorización temporal de ejercicio para la medicina en el suelo salvadoreño, tiene que presentar documentos ante la JVPM para tener autorización…Los profesionales cubanos, algunos, porque no todos lo hicieron, presentaron apostillados de oficinas y ministerios cubanos, y esos no son válidos”, dijo.

“Ahora a la JVPM le están queriendo achacar responsabilidades que no son nuestras. La ministra en forma irresponsable ha estado diciendo que Misión Milagro cerró por acción de la Junta, en realidad la Misión Milagro cerró por que ella es una funcionaria que no cumple con su trabajo, porque parte del convenio con los cubanos era que el Ministerio de Salud (Minsal) se encargaría de tramitarles los permisos para que ejercieran y no lo hicieron, ¿entonces, de quién es la culpa?”, cuestionó el galeno.

Según Pedro Rosalío Escobar, presidente del Consejo Superior de Salud Pública (CSSP), los documentos presentados por los médicos de la isla no estaban apostillados, sino firmados vía consular, y “están presentados correctamente” según a lo establecido en el artículo 334 del Código Procesal Civil y Mercantil.

Beneficiados con operaciones de Misión Milagro y diputados del FMLN exigieron ayer al CSSP que se retire la denuncia ante la Fiscalía. / Jorge López


Sin embargo, Ramos Hinds explicó que de los 19 profesionales de Misión Milagro, “dos no habían presentado ni un papel, ni una fotocopia, solamente aparecían en una lista, mientras el resto había presentado fotocopias simples, hojas de vida y apostillados que no tenían validez (porque eran de oficinas y ministerios de Cuba)”.

Aseguró que la ministra de Salud pidió en enero la autorización para el ejercicio de los médicos, en el periodo de junio de 2018 y junio de 2019, pero la JVPM respondió que no podía autorizar ejercicio retroactivo y solicitó documentación respectiva y requisitos legales.

“Les dimos un plazo y no cumplieron. Después llegó una carta que querían sustituir tres nuevos por tres anteriores, contestamos cuáles eran esos tres anteriores que iban a ser sustituidos y tampoco nos contestó nada, le volvimos a reiterar la solicitud de la documentación, no la presentaron, le volvimos a extender el plazo y no lo presentaron, entonces ya nos correspondía dar aviso a la Fiscalía, porque teníamos indicios que se estaba cometiendo un ilícito, el ejercicio no autorizado de la medicina que es delito”, señaló.

Miembros de la Red de Solidaridad Operación y Misión Milagro El Salvador, diputados del FMLN y pacientes beneficiados con operaciones presentaron una carta al CSSP exigiendo se retire la denuncia de la JVPM ante la Fiscalía y que la Junta “pida perdón al pueblo salvadoreño”.