Una fotografía de un niño sostenido de la tasa de un baño, mientras su hermana lo observa y coloca su mano en su espalda; ha tocado el corazón de usuarios de redes sociales.

La imagen fue publicada en Facebook por la madre de Beckett, un pequeño que sufre cáncer, para que las personas se den cuenta lo que sufren y cómo afectan a las familias la enfermedad de uno de sus miembros.

"Una cosa que no le dicen sobre el cáncer infantil es que afecta a toda la familia. Siempre escuchas sobre las luchas financieras y médicas, pero ¿con qué frecuencia escuchas sobre las luchas que enfrentan las familias con otros niños? Para algunos, esto puede ser difícil de ver y leer", comienza el emotivo relato de la madre de Beckett.

Compartió con usuarios de Facebook lo que le ha tocado vivir a su otra hija a su corta edad, 15 meses mayor que Beckett, por el difícil proceso que ha atravesado su hermano a causa del cáncer.



"Mis dos hijos, con 15 meses de diferencia, pasaron de jugar juntos en la escuela y en casa a sentarse juntos en una habitación fría del hospital. Mi hija de 4 años entonces vio a su hermano ir de una ambulancia a la UCI. Observó a una docena de doctores arrojarle una máscara sobre la cara, pincharlo y pincharlo con agujas, bombear una docena de medicamentos a través de su cuerpo, todo mientras él yacía allí impotente. Ella no estaba segura de lo que estaba pasando. Todo lo que sabía era que algo andaba mal con su hermano, su mejor amigo.
Poco más de un mes después de ser dado de alta del hospital, ella lo vio luchar para caminar y luchar para jugar. El hermano pequeño vivo, enérgico y extrovertido que una vez conoció ahora era un niño tranquilo, enfermo y con mucho sueño. Nunca quiso jugar. Ella no entendía cómo podía caminar antes de esto, pero ahora ni siquiera puede permanecer sin ayuda. Ella no entendía las diferentes terapias a las que tenía que asistir para recuperar su fuerza. Para ella, era algo especial que tenía que hacer que ella no. ¿Por qué ya no podían ir a su parque de trampolines favorito? ¿Por qué no pudieron ir a las almohadillas de salpicadura a las que fueron anteriormente? ¿Por qué no tuvo que volver a la escuela, pero ella sí?", relató.

Explicó que como padres dejaron que la niña se involucrará en esta dura etapa porque consideran que los niños necesitan estar juntos no alejados de los enfermos. Aseguró que de esta manera, su hija se ha convertido en un apoyo incondicional para Beckett.

"Ella pasó una buena cantidad de tiempo, a su lado en el baño, mientras él se enfermaba. Ella se quedó junto a él. Ella lo apoyó y lo cuidó, independientemente de la situación. Hasta el día de hoy, están más cerca. Ella siempre cuida de él.
Vómitos entre sesiones de juego. Despertarse para vomitar. De pie al lado de sus hermanos y frotando su espalda mientras él se enferma. Pasando de 30 lbs a 20 lbs. Este es el cáncer infantil. Tómelo o déjelo. ?", concluyó.