Informar, acompañar, entretener, conectar, son algunas de las principales funciones de la radio, pero ahora en estos tiempos de la pandemia que ha cobrado la vida de miles de personas en el mundo, este medio de comunicación también se ha vuelto en una herramienta de dar razones para la esperanza.

La industria radiofónica ha redoblado sus esfuerzos operativos para mantener conectados a los salvadoreños recluidos en sus casas. Escuchar una voz amiga en la radio favorita es una de las actividades que más aporta en estos momentos de calamidad por el coronavirus.

Las ocurrencias del locutor, la música, dinámicas, las últimas noticias, consejos, chistes, buenas historias son un atenuante para la mente de las familias agobiadas. Por esto las radioemisoras de nuestro país, con todo su equipo de comunicadores y talentos se han adaptado con agilidad y rapidez, para transmitir desde las cabinas o hasta sus propias casas, siempre tomando las medidas preventivas muy en serio.