Este domingo visitará el país Mike Pompeo, Secretario de Estado de EE.UU. La visita, han dicho voceros del Departamento de Estado, busca fortalecer las alianzas regionales y dar un respaldo a la sociedad civil que en Cuba, Nicaragua y Venezuela, ha visto restringidas sus libertades civiles, mientras sufre la violación sistemática de sus derechos humanos.

Su visita es importante, por las posibilidades que abre a la discusión de los asuntos más urgentes en torno a la seguridad y la migración de nuestros compatriotas, pero a la vez, coincide con la nueva postura internacional que mantiene El Salvador de no apoyar regímenes que repriman y encarcelen arbitrariamente a sus ciudadanos.

El reto para los anfitriones del secretario Pompeo será el de convencer a éste de las potencialidades que aún guarda nuestro país, principalmente en lo que a construcción de democracia se refiere. Durante toda la posguerra se han mantenido las libertades individuales y los relevos presidenciales han abarcado el más amplio espectro político e ideológico, distinto a nuestros vecinos que enfrentan sucesivas crisis de gobernabilidad.

Esto no ha sido suficiente por supuesto y los miles de salvadoreños que migran cada día son una prueba de ello. El Salvador debe mostrar una clara apuesta por el futuro, demostrando que está dispuesto a mejorar el presente. Esta visita en una oportunidad para hacerlo.