Sin duda, vencer la pandemia, curar a nuestra gente está en manos de los médicos, enfermeras y todo el personal de Salud que con su entrenamiento, sus capacidades y su dedicación, están cuidando a los pacientes pese a todas las dificultades y limitaciones que como país tenemos.
Todos los países donde la pandemia empieza a ceder han tenido como característica común que han puesto en manos de sus mejores científicos y profesionales de la salud la dirección del combate a la enfermedad.
Hay que dotar a nuestro personal de Salud de todas las herramientas médicas y de protección para que sigan haciendo su labor. El hecho que un 70 % de los contagios no muestren síntomas es algo que nos debe preocupar porque significa que se puede ser foco de contagio sin saberlo, de ahí la necesidad de la aplicación masiva de pruebas y su correspondiente mayor detección de casos.
Los médicos salvadoreños tienen la capacidad y la preparación y sobre todo la disposición y abnegación para atender esta emergencia sin precedentes en la historia del país y del mundo.