El Gobierno de El Salvador anunció un paquete de medidas económicas para mitigar los efectos del coronavirus en las finanzas de la familia salvadoreña; sin embargo, muchas de estas siguen sin efecto.

El ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, anunció, el pasado 18 de marzo, las primeras medidas: suspensión del pago de energía, agua, internet, cable y telegonía, aprobada ayer; y la suspensión al pago de créditos personales, productivos y casas comerciales, aún sin decretarse.

El Gobierno publicó que se congelará el cobro de créditos hipotecarios, personales, tarjetas de crédito, capital de trabajo y de emprendimientos durante tres meses, sin aplicar moras, multas ni intereses, ni afectar la calificación crediticia. Aún no envía los proyectos de decretos a la Asamblea.

Esta medida, sin embargo, sigue sin aplicarse. De no cumplir las obligaciones financieras con la banca, los usuarios serán sujetos a recargos, mora e intereses.

El Gobierno busca, además, congelar los pagos de alquileres comerciales por tres meses y diluir las cuotas en 12 meses; así como suspender los créditos a casas comerciales durante marzo, abril y mayo.

Aún debe presentar este proyecto a la Asamblea Legislativa, por lo que la disposición sigue sin efecto.

Entre las medidas no vinculantes, además, está la suspensión en el pago de primas de seguro.