Cortesía The Dodo
Como sacada de una cinta animada una hembra ganso insistió en atraer la atención de dos policías que realizaban patrullajes en un estacionamiento de Cincinnati, EE.UU. La meta del ave era que la policía lograra desmanear a uno de sus polluelos atrapados por hilos y basura.
"El ganso se acercó a picotear uno de los lados de la patrulla”, dijo el agente de la policía James Givens al sitio The Dodo, quien contó que inicialmente interpretó el gesto como una necesidad de saciar su hambre, por lo que le tiró algo de comida a ver si se calmaba. Sin embargo, el animal obvió las migajas y siguió picoteando y graznando hasta que después de un rato se marchó.
Creyó que el ave había cesado en su insistencia por llamar su atención, Givens no podía creer que, al cabo de un rato, el ganso volviera a repetir el mismo patrón. Fue en ese momento cuando el agente de la policía de Cincinnati se bajó del vehículo y comenzó a seguirla, describe un reporte de Europapress.
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"Me llevó hasta una zona de césped cercana a un arroyo que se encontraba a unos cien metros de distancia", dijo Givens. “Fue entonces cuando vi a una de sus crías enredada en lo que parecía una cuerda de globo”.
Según Europapress el oficial siguiendo el protocolo comunicó el caso a la Sociedad Protectora de Animales que no pudieron hacerse cargo de la situación por falta de medios disponibles en ese momento.
Sin pensárselo dos veces, Cecilia Charron, compañera de patrulla de Givens, se acercó a la cría y con paciencia comenzó a desenredar las cuerdas de su cuerpo, liberándola finalmente.
En aquel preciso momento, ni mamá ganso ni su cría se mostraron "agresivos" o desconfiados hacia su rescatadora. "Es como si mamá ganso supiera lo que estábamos haciendo. Fue increíble", recordó Givens.
Esta historia y el video captado por la policía se ha vuelto viral y sigue sorprendiendo cómo el instinto de una madre puede sorprendernos siempre.