Las mareas vivas evitaron la buena recolección de ostras, para los comerciantes que sobreviven de su ellas. / Rosa Fuentes.


El impacto por el incremento de la marea y la altura de las olas en la playa Las Tunas, del municipio de Conchagua, La Unión, causa preocupación entre los turistas y dueños de negocios.

Ayer, el comercio de la zona tuvo que cerrar debido a la alerta del fuerte oleaje que permaneció por mas de tres horas. Muchos de los comerciantes permanecieron cercanos a sus puestos, para ver que podía suceder con sus negocios. Otros ajenos al comercio llegaron a observar cómo se comportaban las olas.

Cuatro guardavidas de Cruz Roja de La Unión estaban atentos a cualquier emergencia.

Daniel Campos, vicepresidente departamental de Cruz Roja, aseguró que desde el pasado domingo se presentaron niveles altos en las olas.

Ayer, seis turistas fueron rescatados por los salvavidas, a pesar de las advertencias o llamados que les realizaron por diferentes medios de comunicación, a los comerciantes y personas que llegan de paseo, para que no se introduzcan al mar.

También se les ha prohibido la pesca y los paseos en lanchas, tanto a los pescadores y a los bañistas por el fuerte oleaje, dijo Campos.

Campos también aseguró que en la parte central de la playa se están generando corrientes que retornan con gran velocidad al mar y pueden arrastrar a las personas. El oleaje es complicado, se están presentando cambios en la playa y eso es peligroso.
Nos mantenemos en alerta a los comportamientos que se estan dando en las diferentes playas. Lo mejor es prevenir y no ingresar al mar, el oleaje ha llegado a niveles altos que no se había visto antes, la zona de los ranchos es la más afectada", dijo Daniel Campos, presidente de Cruz Roja, La Unión.

Con respecto a las condiciones para bañarse en el mar, las autoridades dicen que siguen siendo de alta peligrosidad, por lo que llaman a la población a no hacerlo .

"Siempre va a ser peligroso para la pesca artesanal y bañistas, posiblemente ese nivel de olas no ingrese a la tierra firme, salvo en algún punto donde tenga un camino o rampas de arena o piedra", señaló Jackson Arias, quien es un lanchero en Las Tunas.

"Las olas alcanzaron de cuatro a cinco metros estábamos asustados, para nosotros es veda porque no podemos trabajar en el mar, el agua está sucia", agregó

Los pescadores manifestaron que esperan que pronto las mareas estén normales y los deje trabajar.

Según el reporte del Ministerio de Medio Ambiente, las mareas vivas seguirán hasta el próximo lunes 28 de junio.

Son más de 50 familias en la zona que sobreviven de la pesca artesanal, realizan paseos en lancha á los turistas , extraen ostras, entre otros moluscos y ahora se encuentran preocupados para llevar el sustento diario de sus hijos y esposas, dijo Nelson Aguilera.

Los comerciantes dijeron que los altos oleajes han ausentado al turista y eso les ocasiona pérdidas porque no venden sus productos perecederos y las autoridades municipales no se ha acercado a la zona a escuchar las necesidades de las familias que viven del comercio por falta de un empleo, dijo Samuel Teyes, restaurantero.

"Ayer Protección Civil nos hizo llegar una nota donde nos pedían que tuviéramos precaución con los turistas por la marea alta, pero como todo se anegó se optó por cerrar el negocio", lamentó.