En el año ya se contabilizan 163 muertos en el país. / DEM


Dos pandilleros con antecedentes policiales y penales fueron asesinados por supuestas rencillas al interior de las estructuras criminales.

Uno de ellos fue identificado como Adrián Ernesto Hernández Recinos y supuestamente pertenecía a la pandilla barrio 18 revolucionarios, fue asesinado con arma de fuego al interior de una vivienda, situada en la colonia Macance, al norte del polideportivo de Nejapa, en San Salvador.

La Policía Nacional Civil sospecha que el crimen fue cometido por mareros de la MS13, tras descubrirlo que habitaba en un sector asediado por ellos.

Hernández había huido del cantón Barba Rubia, de ese mismo municipio, donde era buscado por el delito de privación de libertad según las investigaciones de la policía.

Un segundo pandillero de la MS13 apodado “El Garrobo”, quien recién había salido de un penal, fue asesinado en la colonia Anchila, municipio de Concepción Batres, Usulután.

Sujetos desconocidos lo ejecutaron a tiros al interior de su vivienda, también por rencillas, según la policía.

En otro hecho, el cadáver de un hombre, no identificado, fue localizado a la orilla del río Lempa, cantón La Canoa, en jurisdicción de Jiquilisco.