Desde el 24 de agosto del 2020, la economía del país se empezó a reactivar y la mayoría de empleados regresaron a trabajar.


El médico guatemalteco José Ramiro Cruz, recomendó que es necesario la identificación de grupos funcionales que están en riesgo diario de infectarse para ser vacunados.

Dentro de estos grupos, Cruz no incluyó sólo al personal de salud que ya está siendo vacunado en El Salvador, sino que también transportistas, mecánicos y aquellas personas que deben salir de sus casas para trabajar, ya que muchos de ellos, como personal que labora en restaurantes, pasa varias horas el día en contacto con otras personas.

“Qué pasa con los vendedores, qué pasa con las personas que atienden en supermercados, qué pasa con las personas que atienden en farmacias, qué pasa con las personas que van de casa en casa para hacer arreglos”, agregó el galeno al referirse a la vacunación.

 

Estrategia.


El médico infectólogo, Jorge Panameño, definió esta iniciativa como una estrategia para detener la transmisión del virus y no para reducir la mortalidad.

Para Panameño, esta estrategia de vacunación planteada por el médico guatemalteco consiste en vacunar a los transmisores que pueden llevar la enfermedad a sus hogares, como meseros, maestros, conductores y los mismos usuarios del transporte colectivo, y aislar a las personas de la tercera edad para que no se contagien. De esta manera, Panameño evalúa esta propuesta como una estrategia que puede analizarse.

“Y quiénes son los que andan transmitiendo la enfermedad, son los que tienen que salir de casa porque van a ir a trabajar, porque aquí en El Salvador no es como en Alemania, que yo me voy a encerrar y no voy a tener escasez de comida”, detalló el infectólogo.

La prioridad, según Cruz, es tratar de identificar los lugares más probables para un contagio, y cuáles son las personas en riesgo de adquirir la enfermedad en estos sitios.

El médico instó, durante un foro virtual, a que este tipo de datos e información son las que se vuelven importantes para mantener la economía del país, y no tener que incurrir al otorgamiento de bonos para que las personas “tengan que comer”, además se recomendó impulsar medidas de salud pública como la facilitación de las mascarillas.

“Yo creo que es importantísimo que el Colegio Médico juegue un papel educador, no solo del público sino también de las autoridades”, puntualizó Cruz.
“¿Qué pasa con los vendedores, con las personas que atienden en supermercados, con las personas que atienden en farmacias?”. José Ramiro Cruz, médico guatemalteco

¿Y si ya tuve covid-19?


Además, indicó que sí es conveniente que las personas que han padecido el covid-19 se vacunen, pero que deberían hacerlo cuando “el resto de las personas que no han tenido la enfermedad” se inmunicen, resaltando que si una persona puede donar su plasma a otra significa que se está protegido.

Ante la limitante de las vacunas manifestó que será mejor darle una dosis “a todo el mundo”, aunque se tenga una eficacia del 40 o 50 % del antídoto, a inmunizar solo a la mitad de la población y dejar al resto con cero protección.

Hasta el lunes, el Ministerio de Salud informó que habían vacunado a 6,000 profesionales de la salud de todo el país desde el 17 de febrero.

 

El dato

La estrategia del Ministerio de Salud es primero vacunar a los profesionales de salud y luego vacunar a las personas de la tercera edad, quienes tienen mayor riesgo de morir por covid-19.