Europa Press


El Gobierno de México advirtió este martes de que si Estados Unidos procede con su decisión de designar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas "se debilitaría" la cooperación bilateral en asuntos de seguridad.

"Les hemos hecho saber que no estamos de acuerdo, como tampoco lo ha estado México nunca, con la designación de organizaciones criminales, de delincuencia organizada, como organizaciones terroristas por las implicaciones que puede tener para nuestra soberanía y nuestros intereses nacionales", dijo el ministro de Exteriores mexicano, Marcelo Ebrard

"Nunca ha sucedido que se designe así a una organización de delincuencia organizada, solamente se ha usado cuando hay motivos políticos o religiosos", ha sostenido, durante una comparecencia ante el Senado.

Recalcó que las autoridades mexicanas han informado a Washington que "México no vería con buenos ojos esto" y que "una designación de esa naturaleza provocaría que se debilite la cooperación entre ambos países que, por cierto, es la cooperación más intensa y compleja en materia de seguridad probablemente de todo el mundo".

"Espero que el Gobierno de Estados Unidos coincida con nosotros en esto", manifestó, antes de reclamar a Washington "que reduzca el tráfico ilícito de armas hacia México" si quiere colaborar con las autoridades mexicanas en la lucha contra la delincuencia.

"En México es un delito ingresar con armas que no estén registradas. Hay una obligación corresponsable. Esa es la mejor manera de ayudar a México, no designando organizaciones como si fuesen terroristas", declaró Ebrard.

En este sentido,reiteró en que ambos países hacen frente a "un fenómeno de criminalidad transnacional" y resalta que "el 70% de las armas confiscadas en México provienen de Estados Unidos".

"Proviene de Estados Unidos también una enorme, muy importante cantidad de recursos que manejan los grupos delictivos en México en la delincuencia organizada", dijo, antes de agregar que en sentido contrario van "drogas y precursores".

"Por muy elemental lógica, tiene que haber una carga compartida", dijo Ebrard, quien recordó que "México no podría ni ha aceptado que el problema de consumo en Estados Unidos de diferentes tipos de estupefacientes o drogas ilícitas sea nada más responsabilidad de México".