El cambio climático está haciendo estragos en el mundo. Un reciente estudio del British Antartic Survey reveló que este fenómeno causó un fuerte golpe en la especie de pingüinos emperador en la Antártida, donde miles de bebés pingüinos se ahogaron tras romperse el hielo marino sobre el que se criaban.

Esta era la segunda colonia de pingüinos más grande del mundo, en promedio alojaba entre 14 mil y 25 mil parejas en capacidad de reproducirse; sin embargo, en el 2016 prácticamente desapareció repentinamente.

El coautor del estudio, Peter Fretwell, explicó que “el hielo marino que se ha formado a partir de 2016 no ha sido tan fuerte”.

Los pingüinos emperadores son una especie grande y pesada, por ello necesitan que el hielo marino sea resistente entre abril y diciembre para mantener a las crías. Si estas se rompen antes de tiempo, sus polluelos no tienen el plumaje necesario para nadar, como lo que ocurrió en 2016, información que ayer, fecha en la que se celebró el Día Mundial de los Pingüinos, fue revelada.

La investigación también destaca que luego de lo sucedido, los tres años posteriores han sido un “fracaso reproductivo casi total”.

Los científicos advierten que esta catástrofe podría adelantar el impacto del calentamiento de la Antártida podría tener en un futuro sobre los pingüinos.

Durante los últimos años ha disminuido considerablemente la población de pingüinos emperador en la Antártida, las tormentas han roto los glaciares y esto afecta el periodo de incubación de estas especies.