La ministra de Salud, Ana Orellana, dijo ayer que una de las herencias adquiridas de las administraciones anteriores es la falta de un sistema “de costeo actualizado y claro” para el tratamiento de quemados con pólvora; sin embargo, estimó que entre $900 y $1,000 podría costar en la red pública el tratamiento de una persona quemada.

“Esa es otra de las deudas que tenemos, de las herencias de las administraciones anteriores, que no tenemos un sistema de costeo actualizado y claro. Nosotros estamos corriendo con software especiales y calculamos, según esto, que alrededor de $900 a $1,000 diarios el costo de tener a una persona en estas condiciones (quemada)”, explicó al ser cuestionada por Moisés Urbina, ayer por la mañana, en la entrevista Frente a Frente de Telecorporación Salvadoreña (TCS).

La ministra detalló que una cama en la Unidad de Cuidados Intensivos en el Hospital Nacional Rosales “puede estar rondando entre los $1, 600 a $1, 900 diarios” y señaló que ese costo es “un poco menor que en el sector privado”.

Indicó que el monto es lo que implica el tratamiento especial, las cirugías y la “desbridación” (la división de tejidos fibrosos que pueden originar gangrena) en una persona quemada.

Hasta el 1 de enero, la ministra aseguró que se atendieron 135 personas con quemaduras, 20 de ellos fueron niños, sin embargo, Protección Civil contabilizó 178 quemados, de estos, 96 eran adultos y 82 niños.

El pasado 1 de enero en la madrugada fue ingresado un menor de edad quemado en sus genitales, a causa de silbadores.