Fotografía: cortesía


Una profesora de primaria de una escuela ubica en Washington, Estados Unidos, fue sorprendida por una de sus alumnas que no tenía nada que darle pero guardó una de sus comidas favoritas como obsequio, relata la cadena de noticias, Telemundo.

Lo que para algunos pareciera insignificante, para la pequeña represento todo un sacrificio, ya que decidió regalar los malvadiscos que venían en su cereal con tal de agradar a su maestra.

Los malvadiscos fueron guardados en una bolsa de plástico y los regaló sin pensarlo dos veces.

La maestra admirada, compartió su regalo e invitó a todos a reflexionar sobre esta época ideal para compartir. "A nadie le gustan los Lucky Charms sin los malvaviscos. Estén agradecidos por lo que tienen y por lo que otros les dan", dijo.