La procuradora llegó a petición del FMLN, partido que estuvo 10 años en el Gobierno y que perdió las elecciones presidenciales del 3 de febrero pasado.
La funcionaria dijo que la institución que preside ha recibido 500 denuncias de los empleados despedidos de Casa Presidencial y de cuatro secretarías de Estado; y que están recibiendo asistencia legal.
En tres ocasiones, los diputados del FMLN preguntaron a la procuradora si el nuevo Gobierno violó el debido proceso y los derechos laborales al despedir a los empleados.
Sin embargo, la procuradora respondió con evasivas y matizó que los procesos de denuncias están en trámite o que los procesos están abiertos.
Luego, la titular de la PDDH dijo que su gestión en la institución ha sido “apolítica partidaria”.
A mediados del mes pasado y en la fase de entrevistas para elegir al nuevo titular de Derechos Humanos, los diputados cuestionaron a la procuradora por la supuesta falta de independencia política.
En esa ocasión, la procuradora también expresó que su gestión es “apolítica partidaria”.
Los diputados también cuestionaron a Caballero de Guevara por no haber emitido medidas cautelares contra el Ejecutivo por los despidos que hizo de los empleados públicos.
Respondió que hubo pronta respuesta por parte de la Presidencia de la República, explicando que los despidos eran parte de un proceso de reorganización interno.