Ante una escasez creciente de combustibles, una docena de estados, desde Florida hasta Virginia, declararon el estado de emergencia. Sin embargo, el servicio del oleoducto se reinició hoy.


Colonial Pipeline Co. habría pagado casi $5 millones a hackers de Europa del Este.

Según información consignada por la agencia Bloomberg, esto contradice informes divulgados a principios de esta semana, que afirmaban que la compañía no tenía intención de pagar la extorsión para restablecer las operaciones del mayor oleoducto estadounidense.

La agencia destaca que la compañía pagó el cuantioso rescate en una criptomoneda imposible de rastrear pocas horas después del ataque, lo que subraya la inmensa presión que enfrenta el operador con sede en Georgia para que conseguir que la gasolina y el combustible para aviones vuelvan a fluir a las principales ciudades a lo largo de la costa este, dijeron las fuentes.

Colonial Pipeline, operador de un inmenso oleoducto víctima de un ciberataque el fin de semana pasado en Estados Unidos, retomó este jueves la entrega de gasolina en la mayoría de sus terminales, y la situación en las estaciones de servicio mejora, pero lentamente.

Colonial Pipeline hizo progresos sustanciales en la vuelta a operaciones de la red de oleoductos y podemos decir que la entrega de productos comenzó en la mayoría de los mercados que atendemos", Comunicado de Colonial Pipeline



La red de oleoductos de 8,800 km, la mayor de Estados Unidos para productos refinados, sirve a toda la costa este estadounidense a partir de refinerías instaladas en el Golfo de México.


Golpe estratégico


Esta semana el pánico se apoderó de algunos conductores que hicieron largas filas para cargar combustible en las gasolineras, y la escasez se instaló en algunas ciudades. El abastecimiento normal de las estaciones de gasolina podría tomar "varias semanas", según Patrick De Hann, analista del sitio especializado GasBuddy.

Tras este incidente el precio de la gasolina en estaciones de servicio subió por encima de los $3 el galón (3,8 litros) por primera vez desde 2014, según la asociación automotriz AAA.

Los precios del petróleo avanzaron el miércoles en medio de una ligera baja de reservas comerciales de crudo en Estados Unidos, pero sobre todo por la escasez de gasolina en estaciones de servicio en el país, tras el ciberataque a un importante oleoducto que impulsó a los consumidores a comprar combustible.

En Nueva York el barril de WTI para entrega en junio ganó 1.22 % y cerró en los $66.08.