En el Día de la Cero Discriminación, ONUSIDA destaca el derecho de toda persona a no sufrir discriminación.

 



 

Nunca se debe discriminar a nadie por razones de edad, sexo, identidad de género, orientación sexual, discapacidad, raza, etnia, idioma, estado de salud (incluyendo el VIH), localización geográfica, estatus económico o migratorio, o por cualquier otra índole.


Desafortunadamente, la discriminación sigue minando los esfuerzos para conseguir un mundo más justo y equitativo. Muchas personas se enfrentan día a día a la discriminación por quiénes son o lo que hacen.


PREGUNTAS Y RESPUESTAS MÁS COMUNES SOBRE EL VIH/SIDA



“No lograremos alcanzar nuestras metas en temas de salud ni conseguiremos ninguno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible si no plantamos cara a la discriminación”, expresó Michel Sidibé, Director Ejecutivo de ONUSIDA, en la conmemoración del día de la cero discriminación.




Alguna vez has discriminado? ONUSIDA realizó este quiz con el objetivo de crear conciencia sobre el impacto que tiene un trato desigual a quienes padecen esta enfermedad Ingresa aquí para realizar el test.

Situación global del SIDA


Hace más de 35 años se declararon los primeros casos de VIH, desde entonces 78 millones de personas han contraído el VIH y 35 millones han muerto por enfermedades relacionadas con el sida.

CÉLULAS MADRE: ÚLTIMO GRAN AVANCE EN LA CURA DEL VIH


Con motivo del Día de la Cero Discriminación, ONUSIDA recuerda la igualdad de dignidad y valor de todas las personas, tal como se establece en la Declaración Universal de Derechos Humanos, y hace un llamamiento a la acción para cambiar las leyes y prácticas discriminatorias, que constituyen un obstáculo considerable para el acceso a los servicios de salud y a otros servicios.


ONUSIDA ha señalado diversas leyes que son discriminatorias, que impiden el acceso a los servicios sociales y de salud, que restringen la libertad de circulación y que violan los derechos humanos.




  • Al menos 20 países imponían algún tipo de restricción para viajar a las personas que viven con el VIH.

  • Aproximadamente 29 países informaron de que las mujeres necesitaban el consentimiento de su pareja para acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva.

  • Cincuenta y nueve países notificaron que establecían pruebas obligatorias del VIH para casarse, trabajar u obtener permisos de residencia, o para determinados grupos de personas.

  • Diecisiete países criminalizaban a las personas transgénero.

  • Cuarenta y cinco países contaban con leyes que exigían el consentimiento de los padres a las personas jóvenes y adolescentes menores de 18 años para acceder a los servicios de las pruebas del VIH.

  • Treinta y tres países imponían la pena de muerte para delitos relacionados con las drogas en su legislación.

  • Las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo estaban penalizadas al menos en 67 países y territorios de todo el mundo.



Fuente: ONUSIDA