De acuerdo con miembros del Foro Nacional de Salud, la situación no es diferente en San Salvador, donde hay personal que ha pedido traslado por la misma causa, generando que haya instalaciones funcionando sin el personal completo.
Los Ecos básicos están integrados por un médico, una licenciada en enfermería, un tecnólogo y un polivalente, este último se encarga de “limpiar, organizar archivos, manejar y sacar la basura, entre otras cosas”.
En San Martín se crearon cinco establecimientos básicos: Santa Gertrudis, Los Letona, El Rosario, La Flor y Santa Fe, mismos que se encuentran a cargo de un Eco especializado, el cual está ubicado sobre la carretera Panamericana.
Desde julio pasado, la comunidad Santa Gertrudis y las colonias Aaron Joaquín y Tierra Virgen no cuentan con médico ni enfermera que visite sus hogares. Habitantes de una de las comunidades afectadas aseguraron que únicamente llega la promotora de salud, que se encarga de ubicar vectores, arbovirosis, ver a mujeres embarazadas y apoyar en el control de niño sano.
“A nosotros nos han afectado, imagínese que en la comunidad Santa Gertrudis hay bastantes niños, la comunidad está bien metida. El Eco de Santa Gertrudis beneficiaba a esa misma comunidad y también a la Aaron Joaquín y Tierra Virgen”, dijo María Luis Vásquez, de 20 años, quien hace algunos días acompañó a su hermana menor, Carolina Vásquez, al Eco especializado para que recibiera atención por un dolor muscular.
“Sabe, ese Eco era muy útil porque ahí hay dos escuelas y si alguien tenía un accidente en alguna de las escuelas corrían ahí para que los atendieran, para que los curaran”, explicó.
El pasado 26 de agosto diputados de la Comisión de Salud, de la Asamblea Legislativa, le consultaron a la ministra de Salud, Ana Orellana Bendek, sobre Ecos cerrados en San Martín y Amate Blanco.
“Realmente yo no tengo conocimiento de Ecos cerrados. Yo no he dado ninguna indicación ni los directores regionales y entiendo que ningún director o coordinador de Sibasi. Del Eco San Martín no le sabría decir, porque San Martín es municipio y tiene varios lugares; yo he trabajado ahí, conozco los Ecos y hasta donde yo sé no hay ninguno cerrado. Ahora, sí ha habido algunos que han sido reubicados por el tema de la delincuencia”, respondió la funcionaria.
Sin embargo, Santos Froilán, miembro del Foro Nacional de Salud, aseguró que del Eco especializado San Martín ya se le informó al Ministerio de Salud (Minsal) el cierre del establecimiento en Santa Gertrudis, pero informó que desconoce las causas del cierre.
“Dijo la ministra que no estaba enterada de este problema, cuando dicen que ya mandaron un memorándum para la ministra”, señaló.
Un médico del Minsal, que pidió el anonimato, afirmó a Diario El Mundo que en Santa Getrudis solo había tres personas brindando atención, una de ellas fue amenazada y esa fue la razón por la cual se cerró.
“Ellos no tenían la licenciada en enfermería; estaban trabajando en Santa Gertrudis solo con el médico y la tecnóloga, ya ahí había una deficiencia en la consulta porque hay cosas que son exclusivas de la licenciada en enfermería, entonces el doctor o la doctora que estaba ahí trataba de cubrir algunas cosas y, bueno, se iba saliendo, pero al parecer la tecnóloga tuvo un problema por una amenaza en la comunidad y pidió traslado. Se quedó solo el médico y el polivalente y así ya era prácticamente inoperable, eso es lo que sucedió”, indicó.
El segundo cierre
Tras este hecho, la semana anterior se cerró en San Martín otro establecimiento básico, específicamente Los Letona, debido a amenazas de pandilleros.
“Al parecer los muchachos mandaron a llamar al médico y al licenciado en enfermería y los amenazaron. Los amenazaron no porque los fueran a matar o que se fueran, sino porque ellos querían tener prioridad en la consulta y que cuando ellos llegaran, si estabas comiendo, tenías que dejar de comer para atenderlos. O sea, la amenaza fue que querían tener mejor atención para los pandilleros de Letona”, detalló el mismo galeno.
Recordó que el año pasado conoció otro caso donde un profesional, que laboraba en el Eco Santa Fe, siempre de San Martín, fue agredido por pandilleros y privado de libertad por unas horas.
“Lo agarraron los mareros, lo desnudaron y lo tuvieron privado de libertad como por cuatro horas porque tenía un tatuaje, hasta que no averiguaron de qué era el tatuaje, de dónde era él y quién era no lo soltaron. El tipo, al siguiente día, se fue; o sea, dejó de trabajar”, mencionó.
A esos problemas se agregó el traslado del Eco La Flor, que antes estaba ubicado en una calle que conecta a San Martín con el cantón San Agustín, de San Pedro Perulapán, pero por el alto riesgo tuvo que ser trasladado.
“Ese Eco es bien importante, porque de ahí salen los promotores a realizar el trabajo en campo y tuvo que ser movido, ahora funciona en una Casa Comunal”, explicó Alicia Martínez, miembro del Foro Nacional de Salud.
Su compañero, Santos Froilán, afirmó que el panorama no pinta diferente en los Ecos de San Salvador. Como ejemplo, citó la situación del Eco en la comunidad El Coro, donde manifiesta se han sorteado diferentes problemas.
“A la licenciada en Salud la amenazaron, le dejaron una nota en su escritorio; a la enfermera la amenazaron de palabra y la polivalente se fue porque tuvo problemas personales”, indicó.
Según el médico que pidió anonimato, los Ecos son “un muy lindo proyecto, bien pensado y mal ejecutado”, porque se deben abrir establecimientos “donde realmente se necesita y sean accesibles”.
Recomendó al Minsal consultar sobre las comunidades con el personal que va al campo y no solo con administrativos.
Los Ecos fueron creados tras la Reforma de Salud impulsada por la exministra, María Isabel Rodríguez, en el primer gobierno del FMLN. Hasta la administración anterior, al frente de la doctora Violeta Menjívar, el país contaba con 578 Ecos familiares en 187 municipios.
¿Qué son los ECOS?
DESDE julio del 2010, bajo la construcción de la Red Integral e Integrada de Servicios de Salud, que está dentro de la Reforma de Salud, instalaron los Equipos Comunitarios de Salud Familiar y Especializados, conocidos como ECOS. Buscan ser la “puerta de entrada” al sistema de salud y los conforman un médico, enfermeras, auxiliares de enfermería, promotores de salud y colaboradores de servicios varios; según el Ministerio de Salud, atienen entre 600,000 y 800,000 familias en el área rural o urbana del país.
