Mientras los partidos de derecha piden una transición democrática mediante elecciones libres en Venezuela, el FMLN consideró que la sublevación impulsada por el presidente interino Juan Guaidó es un intento de golpe de Estado.

La diputada Margarita Escobar, de la opositora salvadoreña Alianza Republicana Nacionalista (Arena), señaló que la única salida para restablecer el orden constitucional es permitir una transición democrática dirigida por Guaidó.

“Es el momento que las comunidades democráticas abracen a una Venezuela libre de represión”, afirmó.

El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) reconoce a Nicolás Maduro como el presidente legítimo elegido en las urnas en mayo de 2018. Maduro es su aliado. El FMLN y algunas de sus alcaldías fundaron Alba Petróleos junto a la petrolera estatal venezolana.

“Rechazamos cualquier intromisión, no estamos de acuerdo en agresiones, golpes de Estado, invasiones, que vaya a provocar más desestabilización”, expresó ayer la jefa de fracción del FMLN, Nidia Díaz.

Para el diputado Numan Salgado, del partido Gran Alianza por la Unidad Nacional (Gana), de centro derecha, Maduro debe deponer el cargo para permitir una transición democrática. “Es cuestión de tiempo, no vale la pena, el mandatario ya gobernó durante muchísimos años, debería entender por las buenas que ya no es aceptable por el pueblo”, señaló, instándolo a entregar el poder para evitar un “derramamiento de sangre”.



¿Es un golpe?

Para la diputada y exvicecanciller Margarita Escobar, la sublevación en Venezuela no es un golpe de Estado como lo calificó el FMLN, porque el rompimiento del orden constitucional en ese país ocurrió cuando el régimen de Nicolás Maduro quitó todos los poderes a la Asamblea Nacional que había sido ganada por la oposición en las elecciones de 2015.

Escobar sumó a ello que Maduro puso “magistrados en el Tribunal Supremo Electoral todos obedientes al régimen” y después montó “una Asamblea paralela constituyente que de acuerdo a él debería sustituir a la Asamblea Nacional que no le era favorable”.

Mencionó la crisis humanitaria, empobrecimiento, corrupción, débil separación de poderes y represión para describir un escenario que, afirmó, está lejos de ser democrático.

A ello, Salgado agregó que Maduro “cometió fraude para llegar al poder”. Maduro fue reelegido con una abstención récord y poca participación de candidatos en mayo de 2018, luego de que se adelantaran las elecciones y su periodo concluye en el año 2025.

Raúl Beltrán Bonilla, del PCN, señaló que “el que reprime o asesina a los ciudadanos por ideas políticas está condenado al fracaso” y que el diálogo “llega demasiado tarde a Venezuela”. “Aquí el pueblo es al que le toca elegir su propio camino”, expresó.