El poeta salvadoreño, Roque Dalton, fue asesinado el 10 de mayo de 1975. Foto: Archivo-DEM


La Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), reconoció este jueves el asesinado del poeta Roque Dalton como un “crimen de guerra”, y llamó a la Fiscalía General de la República (FGR), y la Corte Suprema de Justicia (CSJ) a investigar y hacer justicia respectivamente sobre este caso.

El procurador de Derechos Humanos, Apolonio Tobar, consideró que la ejecución extralegal del escritor constituye "un crimen de guerra y un crimen de lesa humanidad", y que por tanto se encuentra sujeto a investigación, y sus responsables a sanción "en todo tiempo y lugar”.

“Recomiendo al señor Fiscal General de la República, doctor Raúl Ernesto Melara Morán, impulse la investigación de modo exhaustivo y concluyente para el esclarecimiento de los hechos, la determinación de las personas responsables, su sanción y la debida reparación de las víctimas”, agregó.

La institución reiteró que, en 2016, declaró que existen elementos suficientes para presumir la participación de la dirigencia del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) en la ejecución extralegal del poeta Roque Dalton García, y, “sobre la base de dicha información y otras evidencias, presumir la participación en tal hecho de los señores Joaquín Villalobos Huezo y Jorge Antonio Meléndez López”.

Los hijos del poeta, Jorge y Juan José Dalton, interpusieron un proceso de amparo ante la Corte, y la demanda fue admitida en julio de 2018. Sin embargo, los familiares del escritor no han recibido hasta el momento una resolución.

“Se exhorta a los señores magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia que impulsen la sustanciación del amparo 254-2018 y se dicte la sentencia definitiva que conforme a derecho corresponda”, añadió Tobar.

El poeta salvadoreño, Roque Dalton, fue asesinado el 10 de mayo de 1975, por una presunta “lucha de ideas” al interior del ERP, organización política opositora al Gobierno de la época, y a la cual pertenecía el intelectual. Tras 45 años de su asesinato, aún se desconoce el lugar donde fue colocado su cuerpo.