El ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, explicó el destino de los fondos que serán invertidos para el plan de seguridad. / Óscar Machón


El ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, explicó este jueves a los diputados de la Comisión de Hacienda de la Asamblea Legislativa una estrategia de financiamiento para aplicar el Plan Control Territorial del Gobierno de Nayib Bukele hasta 2021.

Las tres primeras fases del plan costarán $575.2 millones de 2019 a 2021, ya están disponibles $375.2 millones provenientes de fondos no ejecutados del Fondo General de la Nación, de la recaudación de la contribución especial para la seguridad, de préstamos ya aprobados y donaciones.

El Gobierno encontró recursos no ejecutados de puentes, pasarelas, canchas, de la Dirección de Prevención Social, mobiliario para centros escolares, entre otros.

Los $200 millones adicionales serán adquiridos a través de un préstamo con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) solicitado el 8 de julio de 2019.

De esos $200 millones, el Gobierno urge de $91 millones para aplicar la fase 2 del plan de seguridad en 2019.

El presidente ejecutivo del BCIE, Dante Mossi, le manifestó en una carta al ministro de Hacienda “la disponibilidad del BCIE” para “atender la solicitud del nuevo financiamiento destinado al programa Plan de Control Territorial, lo anterior sujeto a la aprobación de nuestro directorio”.

Por ello, ayer, el ministro llegó a la Asamblea a explicar lo que solicitarán en los próximos días. “Es un tema de que todos estemos informados para que cuando suceda ya todos estamos claros”, dijo al diputado Norman Quijano, de Arena, cuando en una reunión posterior le preguntó si la iniciativa ya estaba presentada en la Asamblea Legislativa.

El presidente de la Comisión de Hacienda, diputado Guadalupe Vásquez, de Gana, espera que ingrese la próxima semana y aseguró desde ya todos los votos de su partido.

 

Capacitarán a jóvenes

La segunda fase del plan Control Territorial incluirá $30 millones para educación y capacitación de jóvenes financiados de los $91 millones del préstamo del BCIE, así como $8.9 millones para tejido social y fuentes de empleo de fondos disponibles.

“Recursos necesarios para poder capacitar a estos jóvenes y llevarlos a un proceso de formación y capitalización de formación profesional, de tal manera que aprendan un oficio, que entiendan que es mejor trabajar dignamente y tener un salario mínimo o más allá del mínimo que estar delinquiendo por una renta de $200”, afirmó el ministro.

El plan incluye $32.6 millones de obra pública comunitaria financiada con fondos ya disponibles y $20 millones de obras financiados con el crédito. En la construcción de bibliotecas en los municipios de alto riesgo se invertirá $30.5 millones, $16.5 millones de recursos disponibles y $14 millones del préstamo.

El financiamiento adicional necesario para 2019 –$91 millones del préstamo– será invertido en capacitación de jóvenes, obras públicas en comunidades precarias, proyectos de agua potable, 28 bibliotecas, intervenciones en cultura y escuelas deportivas.

El ministro pidió a los legisladores que se “apruebe lo más rápido posible” y les advirtió que si se actúa este “es el disparador más grande para generar crecimiento económico y desarrollo”.