Foto Ilustrativa/ Archivo AFP.


En la pequeña isla Inaccesible, bautizada así acertadamente por su localización en medio del Atlántico Sur, la mayoría de las botellas que acaban en sus costas probablemente fueron arrojadas por buques mercantes chinos, concluye un estudio publicado el lunes.

Este trabajo es una prueba más de que las islas flotantes de desechos plásticos en medio de los océanos, cuyas imágenes han escandalizado a la opinión pública, se formarían con botellas y otros artículos de un solo uso arrojados a la naturaleza y a los arroyos no tanto por los consumidores de esos productos, sino por las industrias pesqueras y navieras, que liberan toneladas de plástico en el mar.

Los autores del artículo publicado en la revista estadounidense PNAS recolectaron y compararon miles de desechos recolectados durante las visitas a la pequeña isla en 1984, en 2009 y 2018. La isla se encuentra en el giro del Atlántico Sur, es decir, en medio de un torbellino de corrientes a escala oceánica que concentra en el centro lo que se llama "vórtices de desechos".

Si bien inicialmente la mayoría de las botellas en la isla Inaccesible tenían inscripciones que mostraban que venían de Sudamérica, transportadas por las corrientes desde esas costas hasta 3.000 kilómetros hacia el oeste, en 2018 tres cuartos provino de Asia, especialmente de China.

Muchas de estas botellas de PET fueron aplastadas con su tapón de rosca como se hace en las embarcaciones para ahorrar espacio, asegura el autor principal Peter Ryan, de la Universidad de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. Las fechas de fabricación eran recientes, 90% en los dos años previos a la publicación, excluyendo las que viajaron desde la costa asiática, desde donde el recorrido de la basura dura entre tres a cinco años.

Y como el número de buques pesqueros asiáticos se ha mantenido estable desde la década de 1990, mientras que el número de buques mercantes asiáticos y principalmente chinos ha aumentado significativamente en el Atlántico, los investigadores concluyen que todas estas botellas provienen de buques mercantes, que se deshacen de ellas en lugar de traerlas de vuelta a tierra.

"No hay otra explicación: provienen de embarcaciones y no de las tierras costeras", declaró Peter Ryan a la AFP. "Parte de la flota mercante parece ser responsable, y aparentemente es la flota asiática", expresó.

- Desechos de pesca -
Por lo tanto, es necesario distinguir dos tipos de contaminación marina.

Por un lado, la de playas alrededor de los principales centros urbanos. El plástico que se encuentra allí proviene de las costas: botellas, bolsas y envases de plástico. Pero estos objetos ligeros fluyen fácilmente y son menos arrastrados por las corrientes.

Más adentro de los océanos, los vórtices de desechos contienen fragmentos de objetos de origen incierto, así como artículos utilizados por la marina mercante y los buques pesqueros: no solo las botellas que se consumen a bordo, sino también redes, cuerdas, boyas, cajas, cascos, flotadores... diversas cosas.

"Esta es una causa de contaminación poco conocida", resalta Peter Ryan.

El gran vórtice de desechos del Pacífico está compuesto por la mitad de las redes de pesca, estima el equipo que publicó un estudio el año pasado en la Scientific Reports.

El oceanógrafo Laurent Lebreton, uno de los autores de este estudio, dice que la cifra a menudo cita que el 80% de la contaminación plástica proveniente de la tierra no distingue entre las costas y alta mar.

Lebreton asegura que ha encontrado en el océano Pacífico enormes montones de redes creadas por pescadores, llamadas "dispositivos de concentración de peces", utilizadas para atraer los cardúmenes.

"A menudo no se recuperan y las pierden, encontramos varias toneladas", indicó a la AFP Laurent Lebreton, de la organización ecologista The Ocean Cleanup.

"Todo el mundo habla de salvar los océanos deteniendo el uso de bolsas de plástico, las pajillas y los envases de un solo uso, eso es importante, pero cuando salimos al océano, no es necesariamente lo que se encontramos", expresa el investigador.