Araujo asegura que muchas personas usarían este dinero para un emprendimiento. “El problema es que la mayoría son desempleados y somos emprendedores, buscamos cómo ayudar al país porque fomentamos el empleo a través de los ahorros que nos pueden entregar”.
“Conozco una persona que es barbero y me dice yo puedo poner incluso dos sillones y le doy trabajo a alguien y eso está generando empleo, entonces, la mayoría puede ser que tenga una semilla para comenzar su emprendedurismo o alguien que ya tiene su emprendimiento e inyectarle esa economía para mejorar”, expresó.
Patricio Pineda, fundador de la Mesa para una Pensión Digna, asevera que la propuesta es válida, debido a que es grande el porcentaje de personas que cotizaron un par de meses y posteriormente dejaron de hacerlo y se encuentran en vulnerabilidad social. “ Hay personas que incluso cotizaron uno o dos meses, el sistema los botó y los tuvo que exiliar, y otros ya fallecieron, hay una gama de causas en las que estas personas están en esa vulnerabilidad social”.
Pineda considera que un decreto transitorio podría ser apropiado para enfrentar dicha situación, pero para analizar su permanencia sugirió analizar el impacto fiscal y financiero.