Leo Messi e Ilaix Moriba, durante un entrenamiento | FC Barcelona


Al margen de la tradicional charla de Ronald Koeman con toda la plantilla del FC Barcelona, en el inicio del entrenamiento previo a la visita a Osasuna se ha podido ver una conversación escueta, pero muy cercana, entre el entrenador neerlandés y Leo Messi, según informó Sport de España.

La sintonía entre el técnico y el capitán ha sido buena desde el principio, pero las dos victorias contra el Sevilla han reforzado el proyecto del héroe de Wembley al frente del equipo y, por ende, ha ensanchado la confianza del ‘10’ y del resto de los pesos pesados del vestuario en él.

En el rifirrafe con Pepe Castro y Monchi –presidente y director deportivo del Sevilla, respectivamente– después del enfrentamiento copero, Messi ya ejerció a la perfección de capitán y dio la cara por Koeman.

Demostró que está a su lado y dejó claro a los representantes del club andaluz que no le gustó que le llamaran “llorón” a su entrenador. Este viernes se ha podido ver otra muestra más de la buena relación existente entre ambos.

Además, en los primeros compases de la sesión Messi se ha mostrado cariñoso con Ilaix Moriba. La perla de la Masia se ha afianzado en el primer equipo y, tal como hizo con Ansu Fati, el argentino quiere cuidarlo y mimarlo para que no se desvíe en el camino de convertirse en un futbolista importante en la plantilla.

También ha bromeado con Jordi Alba y Pedri. No ha dejado de sonreír. Su continuidad en el Camp Nou es aún una incógnita, pero la realidad es que, después de unos meses muy complicados, y pese a que el escándalo del ‘Barçagate’ ha vuelto a provocar un terremoto de elevadas dimensiones en el club culé, él está centrado en el lo que más le gusta, en el fútbol; en volver a disfrutar sobre los terrenos de juego; en la pelota, que no se mancha.

Ousmane Dembélé, que pese a volver a reivindicar con otro golazo que se encuentra en su mejor momento desde que viste la camiseta azulgrana, el pasado miércoles encendió las alarmas del Camp Nou cuando se tuvo que retirar por problemas físicos en los últimos instantes del tiempo reglamentario, se ha entrenado con normalidad.

En principio, salvo sorpresa, podrá jugar contra Osasuna y ampliar la racha de partidos consecutivos más larga desde que llegó a Barcelona.