Después de enfrentarse a una sequía severa que afectó a los cultivos de maíz, ahora el sector agrícola debe lidiar con el exceso de lluvias registrado desde el sábado pasado y que si se prolonga ocasionará serios estragos en la producción de frijol, advirtió ayer la Asociación Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo).

Aunque una planta de maíz puede soportar más humedad, una de frijol “se daña rapidísimo”, manifestó Luis Treminio, presidente de la gremial, pues en condiciones como las actuales empiezan a aparecer plagas y hongos luego de tres o cuatro días.

Treminio enfatizó que “es muy aventurado” cuantificar en este momento las afectaciones en los cultivos de granos básicos; sin embargo, advirtió que si las lluvias continúan sí se tendrán pérdidas en la producción de frijol y sorgo, los cuales se siembran entre agosto y septiembre.

El vocero de Campo estimó que las afectaciones en frijol podrían ser mayores a las registradas en la cosecha 2017-2018. En el anterior ciclo también se registró un temporal al cierre del año agrícola, que ocasionó la pérdida de 480,000 quintales de este grano, ya que la gremial estimaba una producción de 2.4 millones de quintales, pero solo se obtuvieron 1.9 millones.

Hugo Flores, viceministro de Agricultura y Ganadería (MAG), indicó que los técnicos del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (Centa) realizan un lavamiento de información “para identificar posibles daños”.

No obstante, reconoció que “sí podemos prever que algunos cultivos, como el frijol, de continuar la situación de lluvia, puede ser afectado por una proliferación de plagas y enfermedades”.



Sector de pesca, el más afectado

El viceministro de Agricultura afirmó que el sector agropecuario más afectado hasta ahora por las lluvias es la pesca y dentro de las medidas de apoyo el MAG prevé la entrega de canastas alimenticias para los afectados.

Flores aseguró que por ley se deben priorizar a los 5,000 productores que forman parte del fideicomiso Pescar. Sin embargo, el registro nacional de pescadores ronda los 22,000, quienes “serán atendidos con otros programas”, indicó.

Waldemar Arnecke, presidente de la Cámara Salvadoreña de la Pesca y Acuicultura (Campac), confirmó que los barcos industriales no salen a mar abierto desde el sábado, mientras que los pescadores artesanales no han podido trabajar desde el viernes.

El líder de la gremial advirtió que si el MAG realiza una segunda veda de camarón marino en lo que resta del año “sería el acabose” y “un golpe fuertísimo para el pescador que ha estado por cuestiones climáticas parado durante mucho tiempo”.

En 2017, el MAG reactivó las vedas de camarón marino durante dos períodos en el año, la primera en abril y la segunda en octubre. El ministerio confirmó a Diario El Mundo que la próxima semana las autoridades del Centro de Desarrollo Pesquero y Acuícola (Cendepesca) sostendrán una reunión con la Comisión Nacional de Pesca y Acuicultura para determinar “la fecha y el período de duración de la próxima veda”.

La institución aseguró que se someterá a consenso con el Comité Científico Consultivo Nacional para la Pesca y Acuicultura, para así tomar las “decisiones respectivas”.

Con anterioridad, Campac señaló supuestas irregularidades en la confirmación de estos comités técnicos, pues aseguró que se incorporaron “organizaciones a conveniencia” del MAG.