Del 13 de junio a este miércoles 10 de julio, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) reportó dos períodos de sequía débil como consecuencia a la presencia de El Niño sobre la región centroamericana. Este fenómeno ocurre cuando las aguas del Océano Pacífico se calientan, y en El Salvador se combinó con un aceleramiento de los vientos en el Caribe y el ingreso del polvo del Sahara.
El MARN cataloga una sequía débil cuando se acumulan entre cinco y 10 días consecutivos sin lluvias. Es moderada si son entre 11 y 15 días secos y se considera severa cuando supera los 16 días.
El informe meteorológico del 8 de julio reportó que el período seco solo persistía en La Unión. El día 10, el MARN informó que las lluvias registradas el fin de semana finalizaron el segundo evento de sequía.
Tanto la Campo como el MARN recomendaron en abril no sembrar en la zona oriental hasta la postrera, que inicia en agosto, pues el Comité Regional de Recursos Hidráulicos (CRRH) advirtió sobre la posible presencia de sequías entre junio y julio por El Niño.
No se esperan daños graves
Si bien es prematuro calcular si estos períodos secos dejarían una pérdida económica para los productores que cultivaron en el oriente del país, Luis Treminio, presidente de Campo, sí advirtió que “con la irregularidad del invierno lo que habrá es disminución en la productividad”.
“Por ejemplo, una manzana que produce 60 (quintales), este año se dará 50, de las milpas ya sembradas. Pero hablar de pérdidas como las del año pasado es bien difícil cuantificar o decir si se perdió”, explicó.
Las proyecciones de Campo para el ciclo 2019/2020 se mantienen en 20 millones de quintales de maíz, otros 2.4 millones de quintales de frijol, 2.7 millones de sorgo y 752,000 de arroz. En total se esperan 25.8 millones de quintales de granos básicos.
Estas cifras son similares a las proyecciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), presentadas por el Gobierno anterior. Para este ciclo, la previsión oficial es de 26 millones de quintales si las condiciones climáticas lo permiten.
El vocero de la gremial indicó que las actuales lluvias, aunque sean de gran magnitud, benefician a los cultivos de la región occidental y central, porque están en etapa de crecimiento y los suelos están secos.
Los datos de la gremial indican que en la región oriental se cultivan 101,032 manzanas, con una producción estimada en 5.5 millones de quintales de maíz. Entre Ahuachapán, Santa Ana y Sonsonate se esperan uno 5.1 millones de quintales, detalló.
En la región paracentral se esperan 3.3 millones de quintales de maíz y, en tanto, los departamentos centrales producirían unos 6.4 millones de quintales.
