Los productores piden que se regulen las importaciones de frijol y arroz, además de mayor control de mercado para evitar acaparamiento de producto. / DEM


La autorización para importar frijol y arroz libre de aranceles podría generar distorsión de mercado y pérdidas a los productores de granos básicos, advierte el sector agrícola.

El Gobierno ha solicitado a la Asamblea Legislativa autorización para que empresas puedan importar hasta 10,000 toneladas métricas de arroz y 30,000 toneladas métricas de frijol libres de aranceles. Según esa solicitud, las medidas transitorias prevendrían un posible desabastecimiento de arroz o alteraciones en el precio a nivel nacional ante los daños ocasionados por las tormentas de Amanda y Cristóbal.

Esas importaciones terminarían de “matar al sector” de arroz, advierte Anibar Santos, productor de Atiocoyo sur, en La Libertad. Pese a que hubo pérdidas por las tormentas de junio, el agricultor asegura que están en proceso de sacar producción al mercado nacional.

“Para nosotros eso es un atentando al agricultor porque han estado importando contingentes de desabastecimiento y no consultan al sector productivo cómo estamos. Nos preocupa que compren el arroz y la cosecha nacional no la vayan a comprar más”, manifiesta Santos.

Por su lado, Luis Treminio, presidente de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo), considera que se ha creado un “déficit ficticio” de frijol en el mercado por acaparamiento “para elevar precios” y asegura que existe suficiente producto en la plaza para suplir el mercado nacional, que demanda en promedio 2.4 millones de quintales anuales.

“Creo que las importaciones en este momento no son correctas. Lo que nosotros insistimos es que hay que fortalecer la producción nacional, el Gobierno en lugar de estar solicitando tanta importación debería estar invirtiendo para que tengamos el producto nacional”, indicó.

Debido a la emergencia por el covid-19 se generó incertidumbre de un posible desabastecimiento de granos básicos y el Gobierno importó en abril 33,000 toneladas métricas de maíz para la reserva estratégica. En ese momento, los agricultores denunciaron que el precio de quintal de maíz cayó por abajo del costo de producción y, según Campo, podría repetirse con el frijol.

“Va a acrecentar el problema de los productores nacionales porque cuando ellos saquen su producción habrá suficiente frijol en el mercado y vamos a tener que vender a precios baratos”, alerta Treminio.

Con las lluvias por la tormenta Amanda y Cristóbal, según datos de Campo, se perdieron 9,800 quintales de frijol de los 2.8 millones previsto para este 2020. Sin embargo, Treminio recuerda que 70 % de la producción de este grano se cultiva de agosto en adelante, por lo tanto aún se comercializa el producto del año pasado más la importación regular.



Importación de arroz

En cuanto al arroz, Campo sí está a favor de importar este producto tras perder 10,000 quintales por las tormentas de junio pasado. Este cultivo se da en las zonas de riego y fueron las principales áreas importadas por el exceso de lluvia con una pérdida de inversión de $712,028.

“Se justifica la importación pero lo que se tiene que hacer es no dar importaciones libres, sino que regular las importaciones, porque de nada sirve que se esté importando y después se crean los faltantes ficticios y empiezan a subirle el precio a los productos”, comentó.

Campo estima que en el país se consume 1.2 millones de quintales de arroz cada año, pero solo se producen unos 800,000 quintales, hay un déficit del 30 %. “Se tendría que promover más la producción nacional”, insistió Treminio.