La Policía Nacional Civil, Fiscalía General de la República y Medicina Legal llegaron a la escuela pero no dieron explicaciones sobre cómo ocurrieron los hechos. / Jorge López
Los familiares de la niña Camila S., de ocho años de edad, reclamaron a la escuela Corazón de María explicar la tragedia ocurrida ayer en ese centro educativo e informar quién autorizó las instalación de juegos mecánicos, aparentemente, para adultos en ese lugar.
Esto luego que la menor cayera de una de las góndolas del juego mecánico de unos siete metros de altura y muriera del impacto.
“No es la primera vez que pasa un accidente de esa naturaleza, mi sobrina ahorita está muerta y no hay ningún responsable que diga ‘pasó esto, pasó lo otro’; el padre Juan Carlos, como el padre que maneja (la escuela) Corazón de María son unos ineficientes, porque todos se están lavando las manos”, dijo Carlos Salguerto, tío de la menor.
Según una de las madres de familia que esperaba la hora de salida, tres niñas iban en una misma góndola, dos cayeron.
“Las niñas se estaban dando vuelta en las ruedas, cuando el cajón (góndola) dio vuelta de gato; dos cayeron al suelo, y la otra niña logró agarrarse”, relató a la prensa una de las mamás.
La otra menor de la misma edad sufrió traumatismos en una mano y fue auxiliada por una ambulancia de Fosalud, que la trasladó al hospital de niños Benjamín Bloom, según informó Cruz Verde y los maestros de la escuela.
El accidente ocurrió ayer pasadas las 10 de la mañana en la zona verde del Centro Educativo Corazón de María, situado atrás de la iglesia del mismo nombre, entre la 77a. y 79a. avenida Norte, en la colonia Escalón, de San Salvador.
Ahí fueron colocados los juegos mecánicos por la celebración de los juegos intramuros, que se desarrollaron el pasado fin de semana.
La niña fallecida portaba su uniforme de educación física. / Jorge López
Las clases fueron suspendidas, después de la tragedia y los alumnos enviados a sus casas.
La Fiscalía General de la República anunció en su cuenta de Twitter que iniciaba la investigación por la muerte de la menor, al mismo tiempo que los maestros, dirección y rector de la institución daban una conferencia de prensa.
“Se ha llamado a nuestra clínica parroquial, al 911, algunos padres de familia y amigos que rondan la institución, por diversas razones, y que viven en esta comunidad han hecho lo mismo. Han asistido los cuerpos de socorro pero ya era demasiado tarde. Una niña había fallecido”, dijo el docente Hugo García.
Agregó que se están haciendo cargo de los gastos fúnebres y de los gastos médicos de la niña que resultó lesionada; negó que hubiese ocurrido un hecho similar antes y señaló que aceptarán los resultados de las investigaciones de las autoridades.
Camila era alumna del tercer grado y la tragedia ocurrió mientras los niños estaban en uno de sus recreos, según los maestros.