Las voces de víctimas del conflicto armado denuncian una nueva ley de amnistía, pero los diputados que la aprobaron defienden los artículos que guardaron con recelo hasta 72 horas antes de llevarla al pleno.

El descontento de organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales no logró detener a la Asamblea Legislativa: con 44 votos, en una plenaria extraordinaria, culminó la aprobación de la Ley de Justicia Transicional, Reparación y Reconciliación Nacional para cumplir la sentencia de la Sala de lo Constitucional.

Valiéndose del plazo que impuso la Sala hasta el 28 de febrero, diputados del PCN, PDC y Arena dieron sus votos para evitar que la Asamblea volviera a caer en desacato, suprimiendo, de acuerdo a las víctimas, su derecho a ser escuchados.

Las salidas ahora se reducen a un veto presidencial anunciado por el presidente de la República, Nayib Bukele; y una nueva sentencia de inconstitucionalidad, advierten juristas y abogados defensores de derechos humanos.

La falta de acceso a archivos militares, las penas mínimas para crímenes de guerra y la inestabilidad jurídica, son sus principales preocupaciones.