Diputados de la Comisión Financiera de la Asamblea Legislativa prohibieron que las instituciones bancarias cobren intereses sobre intereses a los usuarios de tarjetas de crédito que caigan en mora. Este miércoles acordaron agregar un inciso al artículo 22 de la Ley del Sistema de Tarjetas de Crédito para que los bancos solo cobren intereses moratorios “sobre el saldo de capital en mora y no sobre la cuota total no pagada”.

Según los diputados, esta nueva disposición cierra la puerta a arbitrariedades bancarias y posibles cobros de “intereses sobre intereses” en mora del cliente.

“Lo que hacen los bancos es recargar, aparte de la mora, el cobro de intereses sobre intereses o aplicaciones de una especie de comisiones extras por atender ese tipo de cobros de moras. Con la reforma, se está delimitando cómo debe cobrarse”, explicó el presidente de la Comisión Financiera, diputado Francisco Merino, del Partido de Concertación Nacional (PCN).

Los diputados de esta comisión acordaron modificar el artículo 14 con el fin de que las instituciones bancarias entreguen gratuitamente, en forma física o electrónica y en un plazo no mayor a 15 días, el finiquito que comprueba que el cliente ha cancelado el contrato y el saldo total de la tarjeta de crédito.

En este sentido, los diputados también acordaron cambiar el artículo 41 para tipificar como infracción muy grave de los bancos la falta de entrega de finiquitos en ese plazo.

Un nuevo inciso en el artículo 5 garantizaría que por ley los usuarios reciban un alerta en correo electrónico, sin ningún recargo, cada vez que realicen una transacción en comercios afiliados.

 

Discusión

El artículo 20 de la Ley del Sistema de Tarjetas de Crédito vigente estipula que el interés moratorio o recargo por incumplimiento de pago será cobrado “si el monto de la cuota en mora es igual o mayor a $5”. Los diputados estudiarán el miércoles de la próxima semana si reforman esa disposición para que el recargo sea cobrado a partir de una cuota en mora de $20 y no de $5.

Los diputados coincidieron, preliminarmente, que esta medida podría favorecer el bolsillo de los tarjetahabientes, aunque también creen que podría incentivar la cultura del no pago.