Esta instancia judicial admitió este lunes la demanda de inconstitucionalidad contra dicho acuerdo del gobierno de Nayib Bukele y declaró sin lugar la petición para analizar la inconstitucionalidad del llamado presidencial a la insurrección.
Al admitir la demanda y aceptar estudiarla, la Sala de lo Constitucional emitió una serie de órdenes, como medidas cautelares: al presidente Nayib Bukele le pidió abstenerse de usar a la Fuerza Armada para fines contrarios a la Constitución. La orden se extiende al ministro de la Defensa Nacional, René Merino Monroy, y al director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Arriaza Chicas.
La Sala recordó que la Fuerza Armada no puede emplearse con fines políticos o partidistas.
“Aunque el Presidente de la República es el comandante general de la Fuerza Armada... no implica que él pueda usarla para cualquier objetivo (...) Tampoco puede ordenarse que la Fuerza Armada sirva para la seguridad personal del Presidente”, aclara la resolución de admisión.
Según la resolución, el deber de obediencia está condicionada a órdenes acordes con la Constitución, las leyes y el respeto irrestricto a los derechos fundamentales.
Los magistrados también analizarán el uso de policías por el Presidente en los actos ocurridos el 9 de febrero de 2020, y aclara que estos no pueden prestarse para ser usados con fines políticos, personales o partidarios, ni con otro fin distinto al ordenado en la Constitución.
La Sala señaló que no es adecuado que la interpretación de las disposiciones constitucionales “se haga en sentido estrictamente literalista y aislado”.
En la resolución, la Sala también advierte que la Asamblea Legislativa posee un margen de acción para hacer ponderaciones y puede hacer sus propias convocatorias ordinarias y extraordinarias, “pero sin que vengan motivadas por la presión indebida de otro órgano estatal, incluido el Ejecutivo”.
El presidente de la República, Nayib Bukele, aseguró en Twitter que, “por más que resoluciones que emitan”, protegerán el sistema. “Estamos dispuestos a dar todo”.
Bukele ha asegurado que los diputados caerían en “desacato constitucional” y ha realizado llamados a la insurrección, aunque estos no serán analizados por la Sala.
