CONCURSOS Y PREMIOS. Durante el viernes negro, los centros comerciales del país ofrecieron descuentos, premios y ofertas adicionales para los primeros consumidores en llegar a las tiendas.

El viernes negro comenzó antes de que abrieran los centros comerciales en El Salvador, con docenas de familias y parejas que aguardaron en la calle desde tempranas horas de la madrugada para ser los primeros en entrar a sus establecimientos favoritos durante la mayor jornada de descuentos del año.


La temperatura mínima en Soyapango a las 5:30 de la mañana de ayer rondaba los 18 grados, pero eso no detuvo a unos 50 salvadoreños que esperaban impacientes en el estacionamiento de la primera etapa de Plaza Mundo, el centro comercial más concurrido de la zona, para comenzar sus compras.



Laura Martínez, de unos 35 años, cargaba en brazos a su hijo Marvin, de tan solo ocho meses de edad, abrigado propiamente para el frío. “Las cosas se acaban rápido y hay ofertas para los primeros”, aseguró la consumidora, una de las primeras veinte en la fila que ya sobresalía hasta una gasolinera cercana.


La mayoría de comercios comenzaron sus ofertas desde el lunes, pero muchas tiendas ofrecieron descuentos especiales para sus primeros clientes del viernes negro. La jornada se extendió en la mayoría de centros comerciales, desde las 6:00 de la mañana hasta la medianoche en algunos casos.


La tienda de calzado MD ofrecía 50 % de descuento en todos los artículos para los primeros 50 clientes y 40 % de descuento durante el resto del día. A las 7:00 de la mañana, ya había una pantalla de televisión y cinco bolsas negras de MD en la calle, todas de la familia Henríquez.




JORNADA EN FAMILIA. Salvadoreños de todas las edades llegaron desde temprano a los centros comerciales durante el viernes negro. Decenas de salvadoreños acudieron acompañados de sus familias.

“Estos (zapatos) son, digamos, para el estreno de Navidad y una televisión para todos en la sala”, aseguró Armando Henríquez, que junto a su esposa y dos hijos llegó también a Plaza Mundo.


Más al norte, en Antiguo Cuscatlán - el núcleo de los más prestigiosos almacenes del país-, largas filas de vehículos ocupaban la Carretera Panamericana y calles aledañas para ingresar a La Gran Vía y Multiplaza.


Mario Sorto, de unos 24 años y con numerosas bolsas de Tommy Hilfigher, ADOC, Pierre Cardin y Mango, esperaba un Uber para regresar a su casa. Aseguró que llegó a las 6:30 de la mañana para comprar regalos de Navidad y artículos personales en este viernes negro.



En tanto, Ileana Núñez, aguardaba una fila para participar en una rifa de certificados de regalo, cenas y un viaje a Panamá con gastos pagados, una de las promociones de Multiplaza por compras mayores a $15. “Todos los años pido permiso en el trabajo para venir a comprar”, añadió.


Por su parte, la Defensoría del Consumidor desplegó más de 120 agentes en todo el territorio, como parte de su plan de verificación de ofertas y promociones, aseguró Ricardo Salazar, presidente de la institución.



La jornada de viernes negro en El Salvador, sin embargo, no fue tan concurrida como en años anteriores. La tradición estadounidense, en que las tiendas rematan sus precios en un solo día, se adaptó a las costumbres de compra de los salvadoreños, con jornadas de descuentos durante toda la semana, que culminarán el ciberlunes, este 26 de noviembre.