Óscar Ortiz, secretario general del FMLN


El secretario general del FMLN, Óscar Ortiz, quiere que el Poder Ejecutivo asuma el liderazgo en un esquema de emergencia que, según su análisis, ya tiene una base legal: el sistema de protección civil. El problema, según Ortiz, es que la falta de gobernadores, genera burocracia, centralización y poca coordinación con los 262 municipios. Niega que su partido haya estado detrás del desorden ocurrido el lunes 30 de marzo, cuando muchas personas reclamaban un subsidio de $300 del Gobierno, por la pandemia del COVID-19.

 

¿Cómo evalúa el manejo de la emergencia?

Una emergencia sanitaria no conocida en las circunstancias que hemos conocido de otras emergencias, como los terremotos, es mucho más compleja. Lo más acertado que hemos hecho ha sido el aislamiento social, los centros de contención, la restricción a la movilidad, nos ha permitido llegar al punto donde estamos. Lo que tenemos como reto es integrar a todos los actores, esta emergencia no se puede manejar solo desde la Presidencia, tiene que ser asumida tal como lo manda nuestro ordenamiento jurídico. No es casual que El Salvador tenga uno de los mejores de protección en los últimos años, hay un sistema de protección local, departamental y nacional, debe desplegarse completamente.

Tenemos que mejorar en muchas cosas pero todo tiene que ver con el hecho de dejarse ayudar. Dos, poner en marcha el despliegue completo del sistema de protección civil en donde los gobiernos municipales juegan un papel importante y cada sector del Estado.

 

¿No sirve para que los municipios saluden con sombrero ajeno en un año preelectoral?

No, es que no se vale que nadie salude político electoralmente. En una crisis como la que estamos sería desastroso. El primero que tiene que alejarse de eso es el Gobierno comenzando por el Presidente y todo su equipo, porque hemos visto cómo han empezado a dar mascarillas con nombres, eso no se vale. Debemos alejar cualquier intención de querer convertir esto en un tema electoral porque al final vamos a pagar el precio como país. Nosotros hemos orientado a los alcaldes que se pongan al frente de lo que corresponde como ley y la ley dice que hay un sistema de protección municipal que competencias. Así como el gobierno nacional tiene amplias competencias en el liderazgo de la crisis.

 

¿Cuál es la coordinación que tienen los alcaldes con los gobernadores?

No hay gobernadores, esa es la primera gran falla.

 

¿Y si los hubiera, cuál es la coordinación?

La función de los gobernadores es de articular. Yo enfrenté varias crisis, terremotos, lluvias. La clave era el nivel de respuesta inicial es el municipio y luego la articulación intermedia era con los sistemas de protección civil a nivel departamental, ahí teníamos los consejos departamentales de alcaldes y teníamos el equipo del gobierno donde estaba el gobernador o gobernadora, el de Salud, Policía, Ejército, Educación y otras instancias de acuerdo al tipo de crisis. Luego, aquello que no se podía a nivel municipal o departamental, inmediatamente a escala nacional. Pero hoy como no pusieron las estructuras departamentales, se vuelve más burocrática la relación porque al final el Ejecutivo tiene que ir directamente a coordinar con los municipios y, si encima, no lo está haciendo de manera sistemática, es peor.

 

El Gobierno culpó a los partidos de la movilización de gente el lunes.

Esa es una señal muy negativa. Yo lo único que le puedo contestar es: mentira, mentira, mentira, mentira, mentira. Solo le digo que vayamos a los datos. Que enseñe las estadísticas, porque este Gobierno no hace comparativos, todo el tema lo llevan al campo publicitario, al campo del ataque personal, del ataque irracional y en esta crisis que estamos viviendo no se vale. Aquí de lo que se trata es que todos aportemos. No estamos dispuestos a caer en el juego de la provocación, ni a un nivel de división y ataques que no son propios ni de un líder, ni de un político decente y de una fuerza que quiere aportarle a la democracia del país.

 

¿Qué coordinación de sectores debe haber?

Al más alto nivel debería establecerse un llamado del Presidente para una instancia de representantes públicos y privados, incluyendo los partidos políticos. Cuando se logre parar la emergencia sanitaria, viene la otra gran crisis, la del empleo, ingreso, la economía y, en países vulnerables como los nuestros, no vamos a tener la misma mirada que teníamos en otras situaciones. ¿Europa va a volver a ver para acá o para Europa? El Salvador, en una economía dolarizada, que vive de remesas, altamente importadora, con un sector agropecuario limitado, nos enfrentamos a una crisis, hay que salvar vidas pero simultáneamente hay que empezar a generar las condiciones para un plan de país. Si después de lo que pase, ojalá rápido, no logramos poner las medidas de país, no inventos, no caprichos, no posiciones de las fuerzas políticas... Si no lo enfrentamos como país y hacemos un acuerdo práctico, podemos enfrentar otra pandemia que va a ser el tema social. No creo que tengamos menos de cuatro puntos de caída, eso va a ser doloroso. Implica poner niveles de coordinación y articulación entre lo público y privado, mandar mensajes de confianza, no puede ser que tome un acuerdo hoy y la otra semana se encargue de destruirlos sobre la base del ataque y del desprestigio, y después obligar a alguien que le ayude, eso no va a funcionar. De hecho, las grandes experiencias mundiales es que el líder es más grande cuando es capaz de incluir y trabajar en equipo.